El ministerio de defensa ha confirmado que el guardia civil del grupo autodenominado “La Manada”, volverá al servicio activo. El encausado a 9 años de prisión es Antonio Manuel Escudero, su estatus laboral es parecido al de uno de sus compañeros que es militar, Alfonzo Cabezuelo. Ambos han sido condenados por el delito de abuso sexual perpetrado en el 2016 en los Sanfermines.

Las leyes obligan el reintegro

Este martes 17 de julio del 2017, se hizo pública la resolución que emite el Boletín Oficial de Defensa, donde expresa que, en cumplimiento de las leyes para funcionarios de la Guardia Civil, Antonio Escudero vuelve al servicio activo después de finalizar el lapso máximo de seis meses de suspensión y recibir libertad provisional.

A Guerrero no se le ha previsto la asignación de algún destino por el momento. Para ello es necesario el pronunciamiento del Tribunal Supremo con una sentencia irreversible, sin embargo, el guardia civil gozará de las retribuciones básicas, sin algunas primas asociadas al destino y a la productividad.

José Holgado, quien era director de la Guardia Civil en el momento de los hechos que condenaron a “La Manada”, dictaminó en julio del 2016, que se privará a el encausado de la asignación de algún destino hasta la imposición de una sentencia firme.

Libertad tambaleante

El encausado guardia civil del grupo “La Manada”, ha intentado renovar su pasaporte, este acto ha sido considerado por la fiscalía como una violación a las órdenes de cautela que condicionaron su puesta en libertad.

Por tal motivo, se encuentra a la espera de la decisión que el tribunal tome referente a su reingreso a la cárcel.

De esta forma, estaría de nuevo suspendido de sus funciones. El abogado defensor de Guerrero, alegó que el joven solicita la renovación del pasaporte en un acto de confusión, argumentando que su defendido planeaba renovar el documento para entregarlo en cumplimiento de las clausulas establecidas por la Audiencia de Navarra.

Junto con tres miembros más de la “La Manada”, el guardia civil actualmente se encuentra bajo investigaciones por un acontecimiento parecido al de los sanfermines del 2016. El altercado que acusa al grupo en otro suceso de abuso sexual, se registró en Pozoblanco dos meses antes de los hechos llevados a cabo en Pamplona, justamente cuando Guerrero se encontraba destacado en un cuartel de esa localidad. Este caso se encuentra pendiente de instrucción hasta la fecha.