Últimamente, la página de Facebook de la Ópera de Australia ha publicado una noticia advirtiendo a sus fans que todos los mensajes ofensivos difamatorios y abusivos serán eliminados inmediatamente del espacio público.
¿Pero dónde comienzan las palabras ofensivas y donde se acaban?
La Ópera de Australia sigue siendo muy vaga en este tema y se reserva el derecho de definir lo que es o no ofensivo. Los amantes de la música son activos en las redes sociales y se expresan libremente, por lo tanto, a veces contribuyen a crear controversias. Sin embargo, los artistas consideran que las redes sociales son consideradas como espacios de autopromoción.
Esto por ejemplo podría pasar en el famoso programa de Eurovisión.
Por un lado, tenemos instituciones muy preocupadas por el tono empleado en las redes sociales, y por otro lado existe apasionados de la música sin tabúes. La propia gestión de las redes sociales es problemática porque si las grandes marcas tienen su propias “Community Manager”, los artistas comparten esta gestión a través de la comunicación y la publicación con el público.
¿Cómo entonces responder a una crítica virulenta cuando se habla en nombre de una institución de prestigio y que está a cargo de su promoción?
La Ópera de Australia señala la inquietante verdad que el usuario se siente libre de expresarse sin restricciones detrás de su ordenador y a veces en un vocabulario que no se atrevería a adoptar en vivo.
El mundo de la música clásica, cuya acción estratégica en las redes sociales es reciente, redescubre poco a poco Internet. Los debates en las redes sociales y los sitios web rediseñados traducen finalmente un renacimiento de la música clásica en Internet.
Punto de información
La Ópera de Australia es la compañía de ópera más grande de Australia.
Actúa en la ópera de Sydney durante ocho meses al año en el centro de arte de Melbourne. Como la mayoría de las compañías de ópera, está financiada por una combinación de fondos públicos y patrocinadores privados. Además del repertorio clásico tradicional, la compañía ha creado varias óperas australianas como por ejemplo Lindy en 2002 de la compositora Moya Henderson.
La historia de la ópera está basada en una australiana acusada injustamente de la muerte de sus hijos. Moya Henderson es una compositora australiana graduada de la Universidad de Queensland. Estudió composición con Karlheinz Stockhausen y teatro musical con Mauricio Kagel. Además, Henderson dijo que valora el teatro musical sobre cualquier otro tipo de música.