Apenas unas horas después de conocerse la orden de la Fiscalía General de la Nación de citar a más de 700 alcaldes que apoyan el Referéndum, la CUP ha comunicado que los regidores afiliados a este partido no lo harán.
A pesar de estar citados para declarar como investigados, alrededor de 30 alcaldes pertenecientes a la CUP, desobedecerán la orden judicial. Esta decisión es contraria a la que ha tomado la Asociación de Municipios Independentistas (AMI). La entidad a manifestado a través de su presidenta Neus Lloveras que muchos alcaldes se presentarán voluntariamente porque no tienen nada que esconder.
Lloveras, quien también es alcaldesa de Vilanova i la Geltrú ha declarado ante los medios de comunicación que tanto AMI como la Asociación Catalana de Municipios han determinado una "unidad de acción".
Anna Gabriel diputada de la CUP ha expreso publicamente que se mantendrán en esta postura aunque los vayan a detener. La izquierda capitalista catalana han considerado esta medida de demofóbica y como un ataque a los derechos fundamentales. Dos de la ciudades más importantes de Cataluña como son Sabadell y Badalona tienen alcaldes que apoyan el referéndum pero no están adheridos a las asociaciones, por lo que todavía se desconoce si se presentarán a declarar.