Ayer sábado, ha tenido lugar un nuevo encuentro de Viajo Sola. El grupo de Mujeres que se reúne periódicamente para hablar de Viajes en solitario. En esta oportunidad lo han celebrado en el Nómada Market del Mercado de la Cebada, en Madrid. Rosa, su creadora y organizadora es una entusiasta de la libertad que genera el animarse a, casualmente, viajar sola.

¿Qué es Viajo Sola y cuántas mujeres lo integran?

Viajo sola es una comunidad de mujeres que viajan solas que creé en 2016 y gestiono desde entonces en solitario. Realizo entrevistas a mujeres, compartimos miedos y experiencias, más las fotografías del proyecto que realizo yo como fotógrafa, ya que en su inicio era un proyecto fotográfico.

Actualmente somos casi 10.000 mujeres en la comunidad de Facebook y más de 1.000 en Instagram y cada día va en aumento

¿Cómo surge la idea?

La idea surgió en un hostel de San Francisco en mitad de un road trip en solitario, ante la necesidad de contar cómo viajamos en solitario las mujeres, qué miedos específicos tenemos que enfrentar, las opiniones ajenas que aguantamos cuando nos decidimos a viajar en solitario y las satisfacciones que nos da. No hay mucha información sobre mujeres que viajan solas, aunque en redes sociales en los últimos tiempos ha habido un boom y es una tendencia en alza.

En la mayoría de cursos, talleres, emprendimientos creativos, la mayoría de asistentes somos mujeres.

En algunos casos la diferencia es muy marcada. ¿Ocurre lo mismo con los viajes y el turismo?

Según las cifras, el 70% de las personas que viajan solas en el mundo son mujeres. Pero cuesta encontrar españolas viajando solas todavía, nos queda mucho camino por recorrer para que eso no sea una excepción.

¿Qué diferencias existe entre una mujer que viaja sola y un hombre que viaja solo?

Como viajeros no existen diferencias, pero en cuanto a sus necesidades e inseguridades si. Para empezar a un hombre que dice que va a viajar solo, no van a decirle que le van a violar, que si no tiene miedo, que cómo se atreve.. el tema de la seguridad es la principal diferencia. Por lo demás, creo que las mujeres que viajan solas son igual de curiosas, valientes e intrépidas que los hombres que lo hacen.

La maternidad es una de los principales impedimientos para que las mujeres que viajan solas continuén haciéndolo. Sin embargo, la libertad y el sentimiento de quien ya ha probado el decsubrir nuevos horizontes en solitario, no desaparece. Muchas mujeres esperan a que sus hijos crezcan o tengan edad suficiente como para separarse unos días de ellos.

¿Existe este tipo de situaciones en el grupo?

Yo soy madre de dos niñas de 8 y 10 años. Siempre viajé sola pero a raíz de divorciarme recuperé ese tiempo libre necesario para poder retomarlo. Obviamente eso añade un miedo mayor, el que te pase algo, pero no creo que ser madre te cambie en cuanto a tus necesidades como viajera y las ganas de seguir explorando el mundo.

Creo que es positivo que una madre viaje sola, porque con su ejemplo está educando a sus hijos en ejemplos de mujer libre, que no por ser madre dejas de ser mujer y de tener aficiones y necesidades.

Viajar, no solo es una experiencia de placer o descanso. La mayoría de viajeras solitarias, encuentran en ellos una experiencia que las enriquece en todos los sentidos. Es un conocimiento individual que se fusiona con el territorial y amalgama un desenlace del que siempre se sale fortalecido.

¿Has viajado con tus hijas siendo aún ellas pequeñas?

Por otro lado, también “viajo sola” con ellas, por lo menos una vez al año, porque para mi la mejor educación para un hijo es enseñarle el mundo y abrirle la mente, pero para mi eso no es viajar sola, es diferente. Viajé siempre con ellas, también de pequeñas, incluso antes de cumplir 2 años ¡mejor que no pagan billete!