Desde este lunes, aunque una primera búsqueda infructuosa se llevó a cabo el viernes 17 de febrero, la policía busca en un pantano cercano a Monesterio el cuerpo de Manuela Chavero. La mujer de 42 años que desapareció hace 7 meses en un pueblo de Badajoz. A la misma hora, pero a varios kilómetros de distancia, los buzos hacen lo mismo en el Guadalquivir, tras la pista de Marta del Castillo.

En ambas orillas las familias, los padres de Marta y la hermana de Manuela. Antonio del Castillo aguarda en las orillas del Guadalquivir. “Hemos visto algo en el ordenador, que no te voy a decir que no me da esperanza”, aseguraba el padre de Marta, este martes a media mañana.

“Me han enseñado dos ordenadores, se ve de todo, se ven bidones, una silla de playa, objetos de todo tipo. Posiblemente la búsqueda se extienda por 4 días más. He visto algunas cosillas cerca del puente de la barqueta”. Aunque fuentes policiales creen que, como mínimo, el rastreo bajo el río Guadalquivir llevará una semana más.

Este procedimiento se lleva a cabo tras conocerse el testimonio de una enfermera que habría visto a 3 jóvenes empujar una silla de ruedas. Antonio se mostraba esperanzado respecto a la búsqueda. Cree haber visto una figura en el ordenador, pero la policía asegura que no es un cuerpo humano. Eva, su mujer, esta vez se ha quedado en casa.

A cientos de kilómetros, el Grupo de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil, de Extremadura y Andalucía, buscan en el pantano Tentudía el cuerpo de Manuela Chavero.

Este operativo continuará durante hoy miércoles, sin embargo, las dos primeras jornadas de búsquedas no tuvieron resultados positivos. Desde el GEAS han infirmado que las captura y visualización bajo las aguas se realiza a través de un robot con tres cámaras que graban en distintas direcciones. El pantano de Tentudía tiene una profundidad máxima de 30 metros, las condiciones meteorológicas de esta semana no son las mejores para la búsqueda.

Es la segunda vez que se busca a Manuela Chavero en el pantano. El primer rastreo se efectuó durante el mes de julio, a pocos días de desaparecer Manuela, pero se lo hizo poniendo el foco en las orillas y la vegetación. Por la desaparición de Chavero no hay ningún detenido, hasta el momento.

Los Quer se han recluido en sus respectivas casas y no dan entrevistas a la prensa.

La búsqueda de Diana pareciera estancada, pero la Policía no baja la guardia y aprovecha que el caso ya no ocupa las portados de todos los medios, para profundizar en la investigación.

El vínculo que algunos de los sospechosos por la desaparición de Diana tienen con el narcotráfico habría motivado la participación de la ECO (Equipos contra el Crimen Organizado) en el caso. Este equipo se sumará a la investigación policial y a los profesionales que llevan desde agosto analizando el posible paradero de la joven.

Seis meses lleva desaparecida Diana Quer, la madrileña de 18 años, a la que se perdió su rastro una madrugada de agosto de camino a su casa. Las vacaciones de los Quer se vieron truncadas un 22 de agosto, en A Pobra, un pueblo costero de Galicia.