Este miércoles 13 de diciembre debía celebrarse el juicio que tanto ha esperado Marta Riesco, que había demandado tanto a la productora Unicorn Content como a su ‘jefa’ Ana Rosa Quintana por despido improcedente, tras haber sido sancionada disciplinariamente en diversas ocasiones anteriores a la fecha de su despido.

Se aplaza el juicio hasta febrero de 2024

Marta llevaba meses esperando este día para el que se había preparado a fondo, tras incontables speechs en sus redes sociales, acusando, despotricando y llorando, por lo que ella considera un despido totalmente injusto y una especie de venganza, por su relación amorosa con Antonio David Flores, que ella llevaba como bandera de su empoderamiento y de su lucha contra corriente.

En marzo, y tras haber encadenado diversas sanciones disciplinarias, la periodista veía como su sueño como reportera de Telecinco llegaba a su final. Más o menos un mes después, también finalizaba su intensa relación con el exmarido de Olga Moreno y Marta, totalmente sobrepasada, aseguraba haberlo perdido todo.

Ahora ha recibido un auténtico jarro de agua fría al conocer el aplazamiento del juicio que tanto esperaba, convencida como está, de que va a salir de él triunfadora, al igual que lo hizo su expareja Antonio David Flores, a quien la justicia reconoció haber sido despedido de forma improcedente, instando además a Mediaset a volverlo a contratar, algo que naturalmente, no se ha producido y plausiblemente tampoco se producirá en el caso de que la periodista consiga ganar la demanda.

La reportera se reinventa para seguir adelante

En todos estos meses, Marta se ha reinventado como influencer y al mismo tiempo ha seguido desgranando en sus redes sociales, su modo de pensar y de sentir, asegurando que había tratado de seguir fuerte y fiel a sí misma y que siempre lucharía por la verdad y la justicia, buscando la complicidad con sus seguidores, lo que sin duda alguna ha conseguido.

Marta ha intentado por todos los medios seguir ejerciendo su profesión, pero no lo ha tenido fácil. Lo intentó, escribiendo una columna sobre su vida y la salud mental en un medio digital argentino conocido por su amarillismo, pero la colaboración duró más bien poco.

Ahora, la periodista ha vuelto a la calle para ejercer como reportera de una web especializada en encuentros extraconyugales, pensada por y para mujeres.

Marta es el rostro de los reportajes para redes sociales de Gleeden. La reportera, totalmente empoderada, no dudaba en hacer esta declaración respecto a su nuevo trabajo: "Por cierto, ¡qué bien me sigue quedando el micro aunque se hayan empeñado en que no lo vuelva a coger!”.

Marta Riesco esperaba que se acabase hoy una etapa de oscuridad en su vida, pero no ha podido ser y tendrá que esperar a febrero de 2024 para poder resolverla.