Después de 40 años apartada del foco mediático, Pepa Flores ha concedido una entrevista al programa ‘Lazos de Sangre’. La artista andaluza aprovechó la charla para afirmar que estaba muy agradecida a Marisol y añadió que la respetaba mucho. La cantante explicó que el personaje le había pedido “encarecidamente” que lo dijera públicamente, que todos sus seguidores estuvieran más tranquilos.
Pepa Flores desmontó una ‘leyenda negra’ sobre Marisol
La artista comentó que durante muchos años había circulado una “leyenda negra” que afirmaba que “Pepa Flores mató a Marisol”. Los comentarios surgieron después de la desaparición mediática de la intérprete. La retirada de la actriz sorprendió a sus seguidores porque se produjo en un momento en el que era la mejor pagada y valorada en una época complicada para el país.
Sin embargo, Vicky Flores, hermana de la cantante, explicó que la artista se alejó del mundo del cine, pero “dejó intacta” a Marisol. Asimismo dijo que la cantante todavía firmaba autógrafos a sus seguidores primero con el nombre de la actriz y posteriormente con el suyo.
La andaluza fue Marisol desde los 6 hasta los 38 años. Su hija Celia Flores también participó en el homenaje realizado por ‘Lazos de sangre’. En la charla con Jordi González explicó que su madre le tenía mucho amor a todo lo que había hecho en su vida. Cabe destacar que la joven es fruto de la relación de Pepa Flores con el bailarín Antonio Gades.
Asimismo la andaluza Pepa Flores tiene una hija llamada María Esteve, quien ha seguido los pasos de su progenitora en el mundo de la interpretación. Por otro lado, Tamara es la hermana del medio, ella ha optado por dedicar su vida a la psicología.
La entrevistada envió un mensaje a sus seguidores
La cantante también envió un emotivo mensaje a sus seguidores: “Marisol sigue viviendo dentro de mí”.
Ahora en el homenaje, su hija Celia Flores dijo que su madre había trabajado como “diez vidas de una persona normal”. En el año 1960, Marisol rodó ‘Un rayo de luz’, su primera película. A partir de ese momento la niña se convirtió en una figura popular después de una infancia complicada en Málaga.
Marisol vivía en Madrid en la casa de su representante Manuel Goyanes y su madre residía en una pensión cercana. La actriz tenía jornadas de 12 horas en el teatro, además de numerosas películas. La agenda de la joven le provocó una úlcera por la que tuvo que ingresar en un centro de salud.
Incluso la artista iba a cantar a El Pardo todos los fines de semana, algo que le gustaba mucho a la familia Franco.
Finalmente, en el año 1983, Marisol grabó su último disco y en 1985 rodó su última película. Tras su retirada mediática la actriz encontró el amor gracias a un pizzero italiano. Previamente se había casado con el hijo de su primer representante, pero el matrimonio solo duró tres años.