Íñigo Onieva y Tamara Falcó ya son marido y mujer desde la celebración de su boda el pasado 8 de julio en el palacio El Rincón, en la Aldea del Fresno en la afueras de Madrid. La concurrida ceremonia brilló por los elegantes atuendos que lucieron los, al menos, 400 invitados que asistieron a este enlace nupcial. Tamara e Íñigo tuvieron cuatro celebraciones en poco tiempo, entre ellas, la fiesta de pedida de mano, la preboda, la ceremonia nupcial y un almuerzo de despedida.
Aumenta la fama de Íñigo Onieva tras su boda con Tamara Falcó
Tras su casamiento con Tamara, ahora Íñigo se ha convertido en el nuevo marqués de Griñón.
A partir del pasado 7 de diciembre de 2020, Tamara es la VI marquesa de Griñón, justamente nueve meses después del fallecimiento de su padre Carlos Falcó a causa de Covid-19. El mismo mes que murió el marqués de Griñón, salió a la luz pública el nuevo novio de la socialite y después de, al menos, tres años de noviazgo la pareja se ha dado el ‘sí quiero’ en la llamada ‘Boda del Año’. En aquel tiempo, Íñigo era un joven desconocido y ahora es uno de los hombres más famosos de España. El joven no mantiene una buena relación con los medios de comunicación, a diferencia de Tamara.
En relación a este tema, Natalia Puebla Jiménez, experta en Protocolo, ha explicado que tras la boda de Íñigo con Tamara, el empresario ha recibido el título nobiliario de marqués.
Natalia ha dicho que estos títulos actualmente no tienen el “prestigio” que antiguamente poseían.
Íñigo Onieva es marqués consorte
Según Natalia, Íñigo ahora es el marqués consorte, porque el título nobiliario de marquesa de Griñón es de Tamara. Y en caso de divorcio, el ingeniero dejará automáticamente de serlo, de manera que “no tiene muchos beneficios”.
No obstante, las ventajas que obtiene gracias a su matrimonio con la socialite es el disfrute de los bienes junto a su mujer. Desde el punto de vista social, la situación es similar porque a partir de ahora el empresario se rodeará de personalidades y amistades de la hija de Isabel Presley, pero solamente si continúan casados.
De acuerdo a la opinión de Pilar Sánchez de las Heras, especialista en Protocolo, Íñigo ahora es el marqués consorte y esto significa que no tiene ningún tipo de beneficio financiero, ni laboral. Este es un título únicamente simbólico que no representa “funciones, ni privilegios”. Pilar dice que el beneficio que recibe el ingeniero tras su boda con Tamara es solo “la fama” y no ocupará un “cargo específico”. Si Íñigo acude a un evento en el que se use el Real Decreto de precedencias tendrá un lugar en “función de este”.
El noviazgo de Tamara e Íñigo ha estado colmado de altibajos, especialmente tras la infidelidad cometida por el ingeniero, quien ha admitido públicamente sus errores. Unas equivocaciones que la marquesa decidió perdonar y finalmente contraer nupcias con su prometido.
