La socialite Tamara Falcó ha hablado sobre la polémica de su vestido de novia en el programa televisivo de Cristina Pardo, con quien tiene una preciosa amistad. La prometida de Íñigo Onieva ha entrado vía telefónica para dar algunos detalles de cómo se siente en estos momentos y dar su versión en torno a su diseño nupcial. La joven ha explicado que no desea casarse con un vestido que “no me gusta” y que no piensa llegar hasta allí.

La hija de Isabel Preysler niega el plagio de su vestido nupcial

La marquesa de Griñón ha negado que hubiera plagiado un vestido de Chanel y, según ‘El programa de Ana Rosa’, solamente le dio a las diseñadoras “fuentes de inspiración”.

Y es que Tamara negó rotundamente su deseo de plagiar un modelo de vestido, lo que se convirtió en el motivo por el cual la firma de moda Sophie et Voilà decidió romper el contrato con la socialite. Agregó que este supuesto plagio es un asunto “totalmente falso” y que en este caso han intervenido los abogados.

La hija de Carlos Falcó ha admitido que cuando se reunió con las diseñadoras de moda de su vestido de novia tenía una idea clara en relación con el modelo que deseaba. La joven pensó siempre que su idea de vestido podía convertirse en una realidad, no obstante, debido a las semejanzas evidentes con una “pieza icónica” la marca elegida se ha negado a “llevarlo a cabo”.

Por su parte, la firma de vestidos ha alegado que no se pueden “pasar ciertos límites”.

Mientras, Tamara aclaró que durante la segunda prueba todo había “cambiado” y que comenzaron a “tener problemas”. Según, ella: "Habían cambiado mi vestido". Entre Tamara y la firma de moda Sophie et Voilà ha surgido un cruce de acusaciones y ahora tienen versiones totalmente diferentes.

Tamara Falcó se queda sin diseñadoras de su vestido de novia

Tamara ha reconocido que en estos momentos se encuentra dolida y que se ha enterado por medio de la presa que ahora no tiene diseñadoras para su vestido de novia. Aunque tiene claro que encontrará pronto a otra firma que finalmente pueda cumplir su deseo para el día de su boda con su novio Íñigo Onieva.

Un conflicto que, según comenta, le ha hecho “mucho daño”, pero intenta mantener el optimismo y afirmó que “hay soluciones”.

Mientras tanto, Sophie et Voilà enfrenta una tormenta mediática, sin embargo, las diseñadoras explican que tienen la conciencia tranquila en torno a esta situación.

La boda de Tamara e Íñigo está prevista realizarse el próximo 8 de julio, sin embargo, en plenos preparativos nupciales, ahora Tamara no tiene quien diseñe su vestido. El martes de esta semana la firma de moda Sophie et Voilà ha explicado públicamente que no confeccionará este traje a causa del “incumplimiento contractual” de parte de la hija de Isabel Preysler.