Kiko Rivera lleva varios días en el ojo del huracán a causa de su reciente aparición en el programa ‘La Resistencia’. Tras la comentada entrevista, el hijo de Paquirri disfrutó con unos amigos de una hamburguesa en las calles de Madrid y se fumó un cigarrillo. Ante esta escena, la prensa no dudó en capturar algunas imágenes sorpresivas, porque después del ictus que sufrió el pasado mes de octubre, se esperaba que tuviera hábitos más saludables. Esta situación desvela que sus declaraciones sobre un cambio en su vida son contradictorias con estas imágenes y que, al parecer, ha obviado, aunque sea por un momento, las recomendaciones médicas.

Kiko Rivera se comió una hamburguesa y se fumó un cigarro en las calles de Madrid

Kiko sabe perfectamente que se ha hablado mucho sobre él en la prensa del corazón durante las últimas horas y ha decidido pedir perdón por su actitud. Ha escrito en sus redes sociales “culpable” y admitió que se comió ayer una hamburguesa y también que se fumó un cigarrillo. Agregó: “No me lapidéis por ello”. Esta frase acompañaba una de sus fotografías durante el programa televisivo de David Broncano.

Y es que el hijo de la tonadillera se ha arrepentido por haberse revelado una imagen de él que contradice claramente el principio que debía dar. Esto es porque muchos pueden pensar que no está siguiendo las recomendaciones médicas que recibió cuando padeció un ictus el año pasado.

Durante ‘La Resistencia’ Kiko comentó que supuestamente había cambiado sus hábitos y agregó que sus doctores le dijeron que no tomara bebidas alcohólicas y que no fumara. El DJ incluso declaró bromeando que ahora su vida era “más aburrida”.

Pero el hijo de Isabel Pantoja no mintió sobre la posibilidad de pasar los límites médicos solo en algunos momentos especiales.

Admitió que ha cambiado mucho, pero en caso de estar en una reunión con familiares y amigos, no le ocurrirá nada si decide tomar una copa. Dijo que ha sido “un golfo”.

Rafa Mora ha defendido a Kiko Rivera

Su buen amigo, Rafa Mora, quien se encontraba con Kiko cuando comían en plena calle, explicó que el DJ solamente estaba bebiendo un refresco y que esta actitud se dio únicamente en un momento específico.

Rafa defendió a Kiko tras asegurar que quiere llevar todo este asunto “al dedillo”.

Durante el pasado mes de octubre, Kiko, su familia y amigos sufrieron tras el ictus que lo llevó a estar ingresado en un centro de salud en Sevilla, donde permaneció varios días. Los problemas de salud del DJ comenzaron cuando su mujer Irene Rosales notó que algo extraño le ocurría y se desplazó al médico para que lo revisaran. Kiko admitió que lo pasó realmente “muy mal” en el plató televisivo de David Broncano.

El hijo de la tonadillera contó que se encontraba en su casa, se durmió en un sofá y sintió que se caía. Dijo que repentinamente se despertó y que la parte izquierda de su cuerpo estaba dormida. Creyó que había sido a causa de una mala postura, o algo parecido, porque se acababa de despertar y nunca había padecido de un ictus. Agregó que se fue al baño y que se sentía extraño, que se observó en un espejo y su boca estaba algo doblada.