Carmen Lomana se sentó en el polígrafo de Conchita y batió récords con sus mentiras al aparato. La socialite respondió preguntas sobre sus joyas, ropa y operaciones estéticas. Por ejemplo, el ‘Polideluxe’ determinó que la empresaria mentía sobre el valor de sus joyas que no llegaban a dos millones de euros como ella había afirmado. También intentó ocultar sus visitas al quirófano.

La socialite intenta mentir sobre sus operaciones estéticas

Por ejemplo, Carmen Lomana afirmó que solo había pasado por el quirófano hace 15 años por una operación estética de los ojos.

Sin embargo, el polígrafo de Conchita determinó que la invitada mentía e intentaba ocultar sus habituales retoques estéticos. La empresaria también respondió preguntas sobre la monarquía, su relación con Isabel Presyler y su “guerra” con Ágatha Ruiz de la Prada.

La coleccionista de alta costura llego a hablar del aspecto físico de Isabel Preysler: "Se le está cayendo la nariz". Asimismo ha asegurado que la boda de Tamara Falcó era un negocio para promocionar su finca para próximos eventos.

Conchita le preguntó a Carmen Lomana si se consideraba más importante que Georgina Rodríguez y Tamara Falcó para tener una docuserie y aunque respondió que no el aparato determinó que mentía.

También aprovechó la ocasión para comentar que era más “cool” que Isabel Preysler y Ágatha Ruiz de la Prada.

La empresaria dice la verdad sobre Naty Abascal

El único momento en el que el ‘Polideluxe’ determinó que Carmen Lomana decía la verdad fue cuando habló de su relación con Naty Abascal. Por ejemplo, la invitada comentó que comenzó una amistad con la exmodelo sevillana y no se dio cuenta de que le hacía la vida “imposible” hasta mucho tiempo después.

En ese contexto, recordó que durante una fiesta en Ibiza, “tres o cuatro mujeres” se dirigieron a ella para pedirle que abandonara el lugar. Unos minutos después, la dueña le habría dicho que sus amigas querían que se marchara de la celebración. Ante las preguntas de los colaboradores, la aludida respondió que todo había sucedido por “envidia” porque ella llevaba un vestido de Chanel.

En ese contexto, Carmen Lomana remarcó que Naty Abascal no quería verla. Unos minutos después, se pronunció sobre Victoria Federica. Ella cree que la nieta de Juan Carlos I estaba sobrevalorada en el mundo de la moda porque ella no era modelo. Además reiteró que la influencer tampoco se movía en el ambiente de las pasarelas.

En ese momento, Carmen Lomana reconoció que no sabía por qué no la habían invitado al desfile de Dior en Sevilla. La socialite remarcó que merecía estar en el evento porque ella había hecho muchas cosas con la firma y además era una de sus clientas.