Alba Carrillo, la colaboradora de Mediaset, siempre se ha mostrado a favor de Fidel Albiac y ha defendido con uñas y dientes a Rocío Carrasco. Una amistad que nació en el plató del programa Hable con ellas, un proyecto televisivo en el que las dos realizaban funciones de presentadora. Según la madrileña, cuando estaba en tratamiento psicológico y pasando por uno de los peores momentos de su vida, Rocío y Fidel la ayudaron muchísimo a pesar de que no la conocían de nada.

El set de 'Hable con ellas', para Alba Carrillo, es un ejemplo de feminismo 'bien entendido'

Alba Carrillo se ha abierto en su espacio ‘No me tires del Carrillo’ y no ha dudado en defender a la que considera su amiga, Rocío Carrasco, una persona a la que debe mucho. Unas declaraciones que han coincidido con la emisión del capítulo final de ‘En el nombre de Rocío’ y donde relata una cara desconocida no solo de la propia hija mayor de Rocío Jurado, sino también de su marido, Fidel Albiac. Ambos le ofrecieron su ayuda sin conocerla de nada y de ahí surgió una amistad que dura hasta hoy.

Alba explica que, cuando entró a trabajar al plató de ‘Hable con ellas’ tuvo la gran suerte de conocer al matrimonio formado por Rocío Carrasco y Fidel Albiac.

Ese verano fue muy duro para la modelo, pues se acababa de divorciar de Feliciano López. Estaba completamente rota. Además, se encontraba en pleno tratamiento psiquiátrico y psicológico, estaba pasando por una enfermedad (una grave depresión) y le costaba levantarse de la cama, pero debía trabajar para mantener a su hijo, fruto de su noviazgo con Fonsi Nieto.

Alba Carrillo va a estar siempre al lado del matrimonio formado por Fidel Albiac y Rocío Carrasco

El día que hizo el casting conoció a Sandra Barneda y a Mónica Martínez. Fue honesta con el equipo y le dijeron que estuviera tranquila, que la iban a ayudar y que querían que formase parte del programa. La acogieron sin ninguna clase de prejuicio, con un feminismo que a su entender está ‘bien entendido’, con mucho cariño y ganas de ayudar a una persona, a una mujer, que lo estaba pasando mal, por eso siempre estará agradecida, algo que ha aprendido la propia Alba Carrillo a lo largo de estos años, y que reconoce entre lágrimas, es que hay que ser agradecida con las personas que le dieron ese amor completamente altruista cuando pasaba uno de los peores momentos de su vida.

Ese verano fue el más duro de su vida, Rocío y Fidel la apoyaron, le hicieron sentir querida, llamaban por teléfono a su madre todos los días. Este trato emocionó mucho a Alba Carrillo pues eran dos personas que apenas conocía, le brindaron todo su cariño y no por quedar bien. Había unas ganas reales de que ella estuviera en el programa y mucho cariño y, por todo eso, siempre estará a su lado.