En ‘First Dates’, Susana y Manuel protagonizaron una cita muy extraña que mezcló la política con el amor y la pasión. Cada uno era seguidor de una postura ideológica distinta. Mientras que él se describió como un hombre de extrema izquierda, llegado incluso a calificarse como un ‘abertzale’, ella contó que era una mujer de extrema derecha, una afinidad normal en los miembros de toda su familia según dijo.

Susana reveló que apoyaba a Vox. Por eso la participante se sorprendió mucho cuando descubrió que su cita era un militante de extrema izquierda.

No obstante, la mujer de 47 años contó que su abuelo fue guardia Real de Francisco Franco. Acto seguido la comensal explicó que en su casa siempre han sido muy franquistas.

Las costumbres y la afinidad política en la familia de Susana y la reacción de su cita

La participante ha explicado que su madre y sus tíos siempre han elogiado mucho el himno de la Falange ‘Cara al Sol’, algo que a ella siempre le ha llamado la atención. En una parte del programa Susana aprovechó para hablar del líder de Vox: “Yo soy mucho de Abascal... además, tiene un polvo que no se lo quita ni Centella... Está muy bueno”.

La opinión de Susana sobre Abascal provocó que Manuel se riera después de bromear sobre la barba del parlamentario.

Acto seguido el concursante sostuvo que las diferencias políticas no iban a ser un obstáculo para conocer a su cita y saber si era posible tener algo más que una amistad con ella.

La reacción de Susana tras la confesión de Samuel de que no le importaban las diferencias políticas

Muy sorprendida la militante de extrema derecha preguntó a Samuel si estaba seguro de que su cercanía con el partido de Santiago Abascal no afectarían una relación entre los dos.

El concursante respondió que no le importaba que ella fuera de Vox, incluso el participante dijo que serían mucho mejor esas diferencias porque darían un juego interesante en la pareja.

Susana confesó que le había gustado mucho la cita con el concursante. Sin embargo, Samuel sorprendió a todos después que asegurara que le afectaba mucho que su posible pareja fuera una militante de Vox.

Incluso el participante dijo que esas diferencias no harían viable la pareja.

El enfado de Susana por el cambio de postura de Samuel tras confesarle su afinidad por Abascal

Samuel sostuvo que en la calle no habría prejuicios pero en la casa sí. Sin embargo, Susana se enfadó por la respuesta de su cita tras recordar que él había dicho que las diferencias ideológicas no importaban en un romance, algo que a ella la había hecho pensar en un segundo encuentro con el participante. La comensal dijo que el militante de izquierda tenía prejuicios como todos los demás y que había mentido minutos antes.