La constante defensa de Carlota Corredera a Rocío Carrasco han dado un giro desafortunado para la presentadora de ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’. Según lo ha demostrado un estudio de marketing, Corredera ha descendido su popularidad mientras que se esforzaba por mejorar la imagen de Rocío. Tal parece que la audiencia ya no cree que la periodista sea del todo imparcial, por lo que ahora le dan la espalda.
Carlota Corredera baja su credibilidad por defender a Rocío Carrasco
La docuserie de Rocío Carrasco, ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’ ha vuelto a mostrar repercusiones negativas en los allegados de la hija de Rocío Jurado.
Esta vez, se trata de Carlota Corredera. La presentadora del documental se ha labrado una imagen adversa por su trabajo en el espacio televisivo, pues siempre mostró claramente su postura a favor de la protagonista e, incluso, ha llegado a desestimar a quienes opinaban distinto o se posicionaban en defensa de Antonio David Flores.
Dicha postura tan visible hacia el lado de Rocío Carrasco ha logrado que su credibilidad de periodista se vea bastante dañada y, por consiguiente, su audiencia ya no la perciba óptimamente como antes del documental. De esta manera, se podría decir que Corredera ha cavado su propio pozo al no mantener una postura imparcial en la polémica de la hija de Rocío Jurado.
Los estudios demuestran que su popularidad ha bajado varios puntos porcentuales
La agencia de marketing Personality Media ha llevado a cabo un estudio de sondeo para determinar cuál es la percepción que tiene la audiencia sobre Carlota Corredera. Por una parte, se ha concluido que la periodista ha ido creciendo en popularidad, pues es cada vez más conocida por su alta participación en Mediaset; sin embargo, el estudio también ha hallado que “si un 25 % de las mujeres mayores de 46 años le daba, en 2017, una valoración de entre el notable y el sobresaliente, ahora esa cifra cae hasta el 13 %".
Asimismo, si antes el 26 % de este grupo la valoraba entre el rango de "suspenso" de entre 1 y 4, ahora dicho porcentaje es del 51 %.
Además de ello, se ha logrado determinar cuáles han sido los principales factores para que su imagen se vea dañada. Como lo sostiene el análisis, se debe a variantes de gran importancia para el contexto laboral de Corredera como la confianza, la cercanía, la naturalidad, la familiaridad y la modernidad.
Todo ello ha acabado por derrumbar, progresivamente, la credibilidad e imagen de la presentadora.
No solo ha perdido credibilidad frente a la audiencia, las marcas tampoco querrían contratarla
La agencia de marketing también explicó que esto puede afectarla en el mediano plazo, pues las firmas no van a querer contratarla. En este sentido, fue bastante severa y manifestó que, en la realidad, las marcas no quieren involucrarse con personajes que se “mojen” políticamente ni que se comprometan en temas controversiales. Desde este aspecto, Carlota Corredera tampoco parece tener un panorama positivo.