Telecinco emitía anoche el episodio 6 de la docuserie que narra la vida de Rocío Carrasco, 'Rocío, contar la verdad para seguir viva'. Este capítulo ha sido uno de los más duros hasta el momento, ya que la hija de Rocío Jurado relató algunos hechos que la llevaron a empezar a pensar que estaba comenzando el distanciamiento con sus hijos, así como también expuso un episodio que dejaría muy mal la faceta de padre de Antonio David Flores.
Rocío Flores temía que su madre la dejara sola
Tal y como se promocionó en el avance del capítulo 6, Rocío Carrasco narró un duro episodio de la relación con sus hijos.
Una noche, mientras los acostaba, Rocío Flores le pidió a su madre que no apagase la luz ni cerrase la puerta. La madre extrañada ante la actitud de la niña le preguntó que por qué no quería que apagase la luz.
Fue entonces cuando la pequeña le dijo presuntamente que su padre le había dicho que cuando se acostaban, Fidel y Rocío se marchaban de casa y les dejaban solos. La hija de Rocío Jurado confesó que tras dejarlos en la habitación rompió a llorar porque no podía creer como alguien podía ser tan cruel al crear ese miedo en niños pequeños. Cuando es preguntada por las razones que le impidieron tomar cartas en el asunto, Carrasco fue clara, "tenía pánico".
Antonio David amenazó presuntamente a Rocío Carrasco
Además del pánico, Rocío Carrasco reveló que no llamó al padre de sus hijos tras este episodio porque cuando se encontraban para cederse a los niños, él, presuntamente, la habría amenazado. "Yo al principio salía a por los niños cuando me los devolvía y él aprovechaba esas tomas de contacto para insultarme y para decirme que me los iba a quitar, 'voy a hacer que te odien''', explicaba.
Este temor es el que le ha impedido acercarse o tener cualquier contacto con Antonio David Flores, a pesar de que en un primer momento su ideal era seguir un modelo de separación similar al que tuvieron sus padres, Pedro Carrasco y Rocío Jurado.
El día que David se rompió un brazo
Tras esto, la madre de Rocío Flores narró uno de los acontecimientos más duros hasta el momento.
Al parecer, tras un fin de semana, Antonio David le entregó los niños y ella se dio cuenta de que David tenía un bulto en el brazo. Al preguntarle a su hija, esta presuntamente le contó que se había caído de una litera el viernes, pero que su padre no le había llevado al hospital porque le dijo que ya lo llevaría su madre.
Fidel se dio cuenta de que el niño tenía el brazo roto y le dijo que tenían que llevarle inmediatamente al hospital. Allí se diagnostica que, efectivamente, el menor se había partido el brazo y llevó a Rocío Carrasco a interponer una demanda que más tarde acabó retirando porque según ella, nunca quiso "hacer nada en contra del padre de sus hijos".