El regreso de Anabel Pantoja a ‘Sálvame’ tras su rotura de peroné haciendo surf en Canarias que la ha tenido tres meses alejada de plató, no ha podido ser más explosivo. La sobrina de la tonadillera se ha puesto el mundo por montera y ante los repetidos ataques hacia ella, ha estallado de la peor manera.
El motivo del enfado de Belén Esteban con Anabel
Enero es un mes falto de noticias corazoneras y tal vez por eso en ‘Sálvame’ han optado por hacer de su capa un sayo y montar un cisma de algo que no tiene ningún calado.
El hecho en cuestión es la actual enemistad entre Belén Esteban, que casualmente se ha accidentado casi el mismo día que Anabel regresaba a plató tras su baja por rotura de peroné.
Lo de la Esteban es más ligero, un esguince de rodilla al caerse bajando las escaleras de su chalet de Paracuellos, pero la mantiene de baja y ahora es ella la que aparece en pantalla vía Skype. Pues bien, fue a raíz de esa comparecencia cuando Jorge Javier Vázquez, siguiendo las instrucciones que le daban por el pinganillo, incidía una y otra vez en que algo pasaba entre las ‘amigas’. Ni la una ni la otra querían hablar de ello, pero Belén Esteban dejó claro que Anabel había hecho algo que a ella le sentaba mal y que ya lo hablarían.
El machaque durante la semana hacia Anabel ha sido constante por parte de todos los colaboradores, pero la sobrina de la tonadillera no soltaba prenda, hasta que por fin ayer jueves, todo saltó por los aires de la mano, cómo no, de Kiko Hernández.
El nuevo negocio de Belén es competencia directa de Anabel en Instagram
Anabel Pantoja lleva tres años difundiendo en su Instagram una marca de joyería enfocada a la gente joven, al parecer con éxito. Y qué casualidad, el pasado diciembre Belén Esteban iniciaba el mismo negocio con unas joyas sospechosamente parecidas a las que promociona su ‘amiga’.
¿Y qué es eso tan grave que Anabel hizo? Pues subir el mismo día una foto de sus joyas, con lo cual se puede entender que, dado que cuenta con más de un millón de seguidores y muchos de ellos siguen también a la Esteban, el lanzamiento de su ‘amiga’ quedó deslucido.
Días después, Belén Esteban animaba a comprar sus joyas para Navidad y Anabel hacía lo mismo, con sorteo incluido y pidiendo: ‘seguidme a mí’. Los reproches hacia la sobrina de Isabel Pantoja, fueron inusualmente crueles, acusándola de pesetera y mostrando fotocopias de billetes de 500 euros, dando a entender que el afán de lucro es lo único que la mueve.
Anabel estalla ante la insinuación de que en Canarias la detestan
La colaboradora, lleva tres años afincada en un pueblecito canario, junto a su novio monitor de surf, al que apodan ‘el negro’. Un santo barón que le perdona todos sus excesos, ya que ambos se confiesan muy enamorados y planean casarse en cuanto pase la pandemia.
Kike Calleja era el encargado de anunciar que había hablado con ‘el negro’ y con su entorno y que lo que había averiguado no iba a gustarle a Anabel que fuera de sí arremetía contra los guionistas y contra el director de ‘Sálvame’: ‘Que lo sepa España ¡Se lo inventan todo!’
Anabel salía de plató vociferando muy enfadada: ‘¿Ahora me van a sacar una cosa sucia que no existe? Os habéis pasado y me voy porque esto no me compensa’.
Patiño trataba de mediar sin éxito y solo Jorge Javier puedo hacer entrar en razón a la colaboradora, que finalmente volvió a plató y al final de la tarde tuvo que escuchar la voz de ‘alguien’ del entorno de su novio que afirmaba que no la quieren porque es muy déspota, a lo que ella contestaba: ‘¡Es mentira! ¡Que dé la cara!
Kike afirma que tienen mucho material en contra de ella y que de momento la están protegiendo, por lo que es de suponer que van a seguir exprimiendo este argumento hasta la saciedad mientras esperan alguna auténtica noticia con la que rellenar la tarde. Pintan bastos para la colaboradora, a quien castigan por no dar noticias de su tía, ni posicionarse a favor de ella o de su primo Kiko Rivera.