Si ayer Kiko Matamoros sorprendía subiendo una foto en motocicleta, pero sin mostrar su cara y diciendo: ‘lo que queda de mí’, hoy ha decidido lucir su nueva faz conseguida a golpe de botox, aplicado por la que podría ser su futura nuera Carla Barber, experta en cambios radicales.

El problema es que los 14 kilos que ha perdido durante su ingreso hospitalario y que no le sobraban, hacen que luzca peligrosamente demacrado, a pesar de intentar disimularlo, recurriendo al truco de cubrirse la mitad de la cara con la mano que sostiene el puro habano que está fumando.

Algo muy indicado en su estado y que a buen seguro le habrá alegrado el día a los doctores que se desvivieron por él en el Hospital Quirón de Madrid.

Unas vacaciones o una huida hacia adelante

Más bien lo segundo, aunque Kiko Matamoros alegaba para un viaje (al parecer desaconsejado por sus médicos) que tenía que desconectar, cuando lo que le convenía al colaborador tras su operación de vesícula que se complicó con una pancreatitis y una infección de hígado, era reposo y no subirse a un avión durante trece horas, pero Kiko Matamoros hace tiempo que hace de su capa un sayo.

Su fiel escudero Rafa Mora, se hacía el remolón cuando en Sálvame le preguntaban por el destino de los tortolitos, porque naturalmente Kiko y su novia Marta disfrutan juntos de estas vacaciones, aunque resulten algo accidentadas, ya que el colaborador lleva un catéter conectado a una bolsa, para drenar el exceso de bilis del hígado y según sus propias palabras es Marta quien ejerce de enfermera, ya que en el hospital le enseñaron como debía proceder para mantenerlo limpio.

¡Qué bonito es el amor!

Gracias precisamente a Marta López (nada que ver con la recién despedida de Mediaset) que como buena influencer no perdona un postureo, algunos avezados reporteros reconocieron el lugar e incluso localizaron el hotel donde los bungalows cuestan 500 dólares la noche. Eso sí, de nuevo ‘la voz de su amo’ avisó que ese era el primero de los tres lugares paradisíacos a los que pensaban dirigirse y que Tulum ya era historia.

Marta juega al despiste

Avisada por por el aprendiz de Matamoros, la influencer no ha dudado en subir una imagen de Zurich, en un intento de despistar a la prensa que pudiese tener la tentación de seguir su periplo vacacional, pero se supone que la pareja sigue en el Caribe.

Hay que esperar que este viaje contraindicado en su estado, para según Kiko Matamoros evitar que veamos su aspecto actual, aunque ya empieza a mostrarlo, no le acarree consecuencias indeseables, en plena pandemia por coronavirus y con la segunda ola ya encima.

Y si bien la mayoría de los muchos seguidores que tiene en Instagram lo felicitan y desean su vuelta a ‘Sálvame’, también hay quien no entiende esa huida hacia adelante y ese afán exhibicionista de su novia, incluso cuando él estaba doliente en el hospital.