Hugo Sierra está demostrando en “Supervivientes 2020” muchas cosas. Lo primero, que no le gustan los cambios de manera inesperada. El participante va a pasar unos días de intercambio con el otro grupo en Cayo Paloma, separado de su amada Ivana y con los que fueron un día sus compañeros, algo que no le ha gustado absolutamente nada.
Siempre ha reconocido que es una persona muy competitiva y lleva fatal el hecho de perder
Si algo está demostrando el paso del uruguayo por el programa es que hay determinas situaciones que no le gustan y le ponen de los nervios.
Así, el ganador de la edición de “Gran Hermano Revolution” no está nada contento por no ser capaz de ganar tanta pruebas de recompensa como le gustaría ni ha sido líder tantas veces como habría querido. En más de una ocasión, Hugo ha demostrado su cabreo por no lograr ser líder de su grupo o por no conseguir una recompensa, sea por errores propios o por sus compañeros que no lo han hecho tan bien como se esperaba.
También el concursante uruguayo se mostró muy enfadado el día que Ivana y él fueron expulsados por la audiencia o cuándo la decisión de la misma fue que no disfrutarán de una noche de amor en solitario. Pero un nuevo cambio en la isla ha provocado que el ex-novio de Adara Molinero vuelva a perder los nervios en pleno directo.
Esta semana los protagonistas del intercambio fueron Ferre y Hugo Sierra, tomando el relevo de José Antonio Avilés y Fani. Así, Hugo llegó a Cayo Paloma y al reencontrarse con los que fueron, en su día, sus compañeros no pudo evitar sentirse decepcionado.
En la nueva playa, Hugo se ha encontrado que no hay nada comparando con el enclave en el que está su equipo
El participante ha tenido tal disgusto por el nuevo destino que ha llegado a perder los nervios. Según Hugo, en la otra playa tienes posibilidad de pescar, un montón de leña, su equipo ya fue capaz de hacer fuego… Al llegar a Cayo Paloma la situación es completamente diferente y se ha dado cuenta que le gusta más la otra playa.
El participante no podía ocultar que estaba nervioso y con bastante pocas ganas de historias.
Con este cambio, Hugo se ha vuelto a encontrar con la madre de Adara, Elena, con la que ha sido capaz de enterrar el hacha de guerra aunque Hugo no puede ocultar que no le gusta compartir espacio con la abuela de su hijo. Aunque ambos están demostrando que son capaces de convivir durante estas 48 horas que les ha tocado estar juntos.
Por encima, el uruguayo se encuentra separado de Ivana, algo que no le hace ninguna gracia a la ex-pareja de Adara. Por encima, esta semana estuvo nominado por lo que no le parecía buena idea pasar las últimas hora en el programa alejado de su amada y lo ha dejado más que claro. Él tenía claro que prefería pasar toda la semana junto a sus compañeros y su pareja en la playa que todos desean, Cabeza de León.