Una lectora de labios ha descubierto cómo fue la última charla, en público y como miembros de la familia real británica, de los duques de Cambridge y sus cuñados, los Duques de Sussex. Como era esperado, el último acto oficial de los polémicos duques de Sussex ha sido analizado hasta el más mínimo detalle, incluso, los murmullos que se cruzaron en un momento determinado entre ellos o con los duques de Cambridge.
La Misa tradicional por el Día de la Commonwealth que tuvo lugar este lunes en la histórica abadía de Westminster no solo ha significado el último acto oficial del príncipe Harry y su esposa, la actriz Meghan Markle, con la Familia Real británica; también es la primera vez que, en público, coinciden todos los miembros del núcleo duro de la familia desde hace más de tres meses.
Harry parecía triste ante el "pasotismo" de su hermano hacia él y su mujer
Por ello, la expectación era un hecho y cada detalle, cada mirada entre los miembros, cada palabra entre ellos y cada actitud han sido analizados al milímetro por los medios de comunicación británicos.
Varios medios han decidido contratar a lectores de labios profesionales para poder descubrir que es lo qué se decían, por ejemplo, el príncipe Guillermo con su mujer, Kate Middleton, en el momento de la entrada de la abuela del joven, la reina Isabel.
Cuando los duques de Cambridge llegaron a sus asientos, Harry y Meghan ya estaban sentados en sus respectivos puestos. Las cámaras fueron capaces de captar el momento en que ambas parejas se saludan, pero parecía imposible saber lo qué se decían. Solo se ve a Meghan dirigiéndose a sus cuñados con un amigable “hey”.
Este ha sido el último acto de los Duques de Sussex como miembros de la Familia Real
Cuando los duques de Cambridge se sientan, Harry solo le dice a su mujer que le han dicho “Hola, Harry” y se acabó.
Unas palabras que la actriz asiente con una sonrisa, a pesar de que hay cierta tristeza en la manera de expresarse por parte de Harry (seguramente, esperaba que su hermano lo tratase de manera más cariñosa o próxima).
Todo parece demostrar que Guillermo no está muy preocupado ante la nueva situación de su hermano y a pesar de la aparente incomodidad a la hora de saludarle.
Y es que las palabras que comparte con su mujer, al sentarse en su puesto, no tienen nada que ver con la situación de su hermano (y, quizás esa sea la clave de la tristeza de Harry, el “pasotismo” por parte de su hermano).
Guillermo estaba más preocupado por el tema de los apretones de mano que han tenido que dar en la entrada. Su mujer y él iban a tener que utilizar un montón de gel desinfectante después de eso, en clara alusión a las medidas preventivas de contagio por coronavirus.