El intermedio de la “Super Bowl” es uno de los eventos más seguidos en la Televisión de Estados Unidos. Las audiencias son millonarias y cualquier artista estaría orgullo de tener la posibilidad de participar en un acto así. Este año, dos mujeres latinas, con más de dos décadas de carrera a su espalda, se han convertido en las grandes protagonistas y han dejado claro que los responsables cometieron un error; se merecían un show en solitario.
El show fue mucho más latino en plena época de Donald Trump
Las cantantes lograron hacer un gran show donde demostraron la fuerza de las mujeres y de las latinas a la hora de amenizar a los telespectadores durante el intermedio del evento deportivo más importante de Estados Unidos, la Super Bowl, y han dejado claro que cualquiera de las dos habrían podido sacar adelante el show por separado.
Si aún había alguna duda sobre la calidad como artistas, anoche Shakira y Jennifer López han querido dejar claro que unirlas ha sido una gran elección en uno de los momentos más importantes de la televisión de los Estados Unidos, la Super Bowl, una gran decisión que tenía un gran fallo: cualquiera de las dos se merecían un show en solitario.
Muchos telespectadores han dejado claro que ha sido un error no ofrecerles hacer un show en solitario para poder disfrutar de sus dotes como cantantes, bailarinas y divas. Al tener que repartirse el tiempo entre las dos, han quedado muchos temas en el tintero y los seguidores de las cantantes se han quedado con las ganas de bailar.
Las dos divas de origen latino compitieron con movimientos de cadera y con sus melenas
Pero, también, han dejado claro que pueden hacer un show revueltas y que hay una gran relación entre ambas. Sin duda, muchos decidieron despertarse viendo la actuación y con un show irrepetible.
La primera en actuar ha sido Shakira que ha bailado, cantado en varias lenguas, rescatados algunas de sus canciones de mayor éxito (sobre todo, durante su carrera en los Estados Unidos); pero, se han quedado muchos otros guardados para otras ocasiones.
Un golpe de efecto por parte de Shakira que, de esta manera, vuelve a actuar en Estados Unidos después de sus problemas de salud que casi le dejan sin voz. Y, nada más y nada menos, midiéndose con Jennifer López.
Esta última ha superado todas las expectativas y ha hecho un show que parecía de otro mundo. Apareció muy acelerado, interpretando el mayor número de temas por minuto, mucho baile, acrobacia y unas extensiones que mostraban una verdadera diva.
Incluso, ha subido a su hija al escenario, con la que ha protagonizado uno de los momentazos del show. Vamos, que ha quedado claro que Jennifer López, a sus 50 años de edad, lo que quería era darlo todo