Adara y Gianmarco han vuelto a verse las caras después de casi un mes sin estar frente a frente. Y, el reencuentro no tiene nada que ver con el comportamiento que tenían cuando coincidieron dentro de la casa de Gran Hermano VIP 7”."No me fío de ti, me has decepcionado muchísimo, eres una persona completamente diferente a la que conocí", aseguró Adara

El momento era muy esperado por la audiencia de “Gran Hermano”. Después de hacerse con el valioso maletín, Adara volvía a la casa de Guadalix de la Sierra. Una oportunidad de oro para poder resolver todas las deudas pendientes entre los concursantes de la edición en el nuevo reality de Telecinco, “El tiempo de descuento”.

La joven se mostraba muy nerviosa ante la idea de volver a reencontrarse con el hombre con el que protagonizó una historia de amor durante los tres meses de concurso. Pero, desde que acabó el programa no se habían vuelto a ver.

Al final su historia de amor fue mucho más fugaz de lo esperado

La ex-azafata reconocía que tenía una conversación pendiente con el modelo y Gianmarco había sido, sin duda, su gran decepción. Por esa razón, principalmente, había tomado la decisión de no seguir con la relación. Además, tenía claro que no iba a permitir que la historia se repitiese en esta segunda oportunidad. Igualmente, ha confirmado que no está con Hugo Sierra, padre de su hijo, ya que han decidido darse un tiempo después de todo lo que ha pasado a lo largo de todos estos meses.

El reencuentro estuvo cargado de reproches y una tensión que iba en aumento.

Adara ha querido ser muy contundente reconociendo que desde el programa del debate, el pasado 20 de diciembre, le ha quedado claro que el italiano no quería verla, ni saber cómo estaba. Una gran decepción para la joven que había apostado por la relación a pesar de que tendría que enfrentarse a una situación fuera de la casa bastante complicada.

Adara reconoce que la vida dentro de la casa es muy diferente a la 'vida normal'

Además, le reprochó al modelo que lo único que ha hecho desde que salieron de la casa fue exigirle cosas a pesar de ser conocedor de la dura situación personal que está viviendo. Eso sí, Adara quiso dejar claro que lo que vivieron dentro de la casa fue una verdadera historia de amor, pero la vida dentro de la casa no tiene nada que ver con la “vida normal”.

Y, después, Gianmarco ha querido dar una imagen en los medios que no es verdad, intentando quedar como una víctima cuando no era cierto. Pero, el tono iba en aumento y Adara se sorprendía por el tono que utiliza el modelo a la hora de hablar con ella, ya que, venía muy subidito y demostraba algo que ella decía desde hace tiempo, el modelo es un egocéntrico, solo piensa en él y en ganar dinero.