Varios meses después del fin del rodaje de “Juego de Tronos”, Emilia Clarke ha asegurado que se sintió presionada a la hora de realizar escenas con desnudos en la famosa serie de Televisión. La actriz, que llegó a decir que no quería hacer más desnudos ya que quería ser valorada por sus dotes interpretativas no por sus desnudos, ha asegurado que sus jefes llegaron a decirle, en las primeras temporadas de la producción, que la actriz debía hacerlo para no decepcionar a sus miles de seguidores.
Emilia Clarke no tiene problemas a la hora de hablar sobre los desnudos que tuvo que hacer en la famosa serie de televisión, producción que la catapultó e hizo que miles de personas la sigan en todo el mundo.
La actriz ha asegurado que fue presionada por sus entonces jefes. Según la intérprete, cuando tenía que prepararse para hacer una escena de desnudo, muy frecuentes en las primeras temporadas de la serie, cuando se negaba o ponía algún problema, los productores la presionaban.
Clarke revela que los productores le decían que no tenía que decepcionar a sus fans
Por ejemplo, en una escena, ella llegó a quejarse diciendo que la sábana no la cubría lo suficiente. Sus jefes le contestaron que no estaría bien que decepcionase a sus seguidores. Todas estas revelaciones tuvieron lugar durante una entrevista en el programa de Dax Shepard, 'Armchair Expert'.
La actriz acaba de cumplir 33 años, pero cuando inició el rodaje de la emblemática serie, en el mes de julio del año 2010, solo tenía 22 años, era mucho más ingenua, muy joven y estaba dando sus primeros pasos en el mundo del cine.
Ahora, es mucho más sabía, sabe qué cosas le hacen sentir cómoda y con cuáles no se siente cómoda, tras acumular varios años de experiencia y una filmografía en paralelo al rodaje de la serie estrella de HBO.
Las primeras temporadas de 'Juego de Tronos' se caracterizaron por las escenas de desnudos y violencia
Para la actriz, el número de escenas de desnudos durante la primera temporada de la serie fue algo abrumador y llegó a depender del alcohol para poder hacer frente a las mismas.
Incluso, en una entrevista para The Sun, en el año 2016, sobre este tipo de escenas, aseguraba que solo necesitaba vodka, una luz que le favoreciera y ya estaría lista.
La realidad es que ella aceptó el contrato antes de leer el guión y no sabía que había tantos desnudos. Acababa de salir de la escuela de teatro, no tenía mucha experiencia y decidió seguir adelante con el proyecto.
Si estaba en el guión, entonces era que el desnudo era necesario. Pero estar desnuda en un enorme plató rodeada de gente no le hacía sentirse cómoda y no se sentía cómoda ni encontraba sentido a lo que iba a hacer. Aunque de aquello tuvo una gran lección de aprendizaje.