Hacía cuatro años que la colaboradora de Televisión Miriam Sánchez no salia en televisión. La última vez, era consejera del amor en “Mujeres y hombres y viceversa” y su nombre cayó en el olvido, después de la polémica protagonizada por su pareja y compañero, Pipi Estrada. Hay que recordar que el comentarista deportivo podría haber facilitado el teléfono de algunas chicas del programa a futbolistas para que se conocieran, lo que provocó el despido de la pareja de Mediaset.
Pues bien, parece que la joven no estaría pasando por su mejor momento a nivel económico a causa de los tuits que ha subido en los últimos tiempos.
Hace unas pocas semanas se sometió a una operación completa de cirugía estética y fue duramente criticada por la forma que tuvo de promocionarse: mostró el antes y el después, se mostró con las vendas... todo en un intento de lograr que la operación le saliera gratis utilizando su influencia en las mencionadas redes sociales como pago.
En el año 2017, ya vendió sus prótesis mamarias a través de las redes sociales
Ya en el mes de enero del año 2017, la propia Miriam sorprendía al decidir vender sus prótesis mamarias por Internet. Según ella explicó, sabía que los seguidores de Lucía Lapiedra (su nombre artístico durante los años en los que fue una estrella del cine para adultos) estarían encantados de hacerse con las mismas y, al mismo tiempo, era una manera de romper con esa etapa de la vida que quería dejar atrás.
Pero, hace unas semanas, utilizaba el mismo método para vender su coche.
Todo esto hace pensar a los colaboradores de “Sálvame” que la colaboradora estaría buscando la manera de ingresar dinero, casi de manera desesperada.
Berto Molina, periodista que fue bastante cercano a ella, asegura que durante los diez años que Miriam Sánchez fue un personaje recurrente en el mundo de la televisión (ganó “Supervivientes”, fue comentarista de reality, la asesora del amor que más tiempo duró en “Mujeres y hombres y viceversa”...
entre otras muchas tareas) llegaría a ganar dos millones de euros, unido a los dos áticos en el barrio del norte de Madrid, Las Tablas y una plaza de garaje... Por tanto, Miriam tendría más posibilidades de ser millonaria que de estar pasando por un mal momento económico.
Pero, parece que la realidad es muy diferente. Desde que dejó la televisión, la joven no tiene ningún ingreso conocido.
Y su vida ha cambiado completamente en estos años. Si hace unos años intentó renovarse y ganarse la vida como maquilladora de cadáveres, al final, no logró su objetivo.
Por otro lado, la colaboradora ha cambiado muchísimo físicamente, engordando bastantes kilos y descuidando su físico, algo que ha sorprendido a sus seguidores que todavía tienen en la mente la imagen de una chica rubia, de ojos claros, alta y muy explosiva.