Varios medios de comunicación británicos han querido recordar a la actual Duquesa de Cambridge que todo el mundo tiene un pasado. Y, por suerte o por desgracia, este siempre vuelve. En su caso, la esposa de Guillermo de Inglaterra ha intentado olvidar un episodio que tuvo lugar en Balmoral, al principio de su relación con el príncipe.
Al inicio de su noviazgo, Kate se mostró en público en una de sus sesiones para aprender a cazar, dentro de su estrategia para poder hacerse con el beneplácito de la familia Windsor.
Hace casi 12 años, unas fotos de una jovencísima Kate intentando ganarse el favor de su familia política levantaron ampollas
Hay que remontarse al mes de octubre del año 2007, cuando la propia Kate era fotografiada junto a su suegro, el príncipe Carlos, del que es sabido por todos los periodistas que el eterno heredero es un gran amante de la caza. Las imágenes fueron realizadas durante una jornada en la que Kate estaba aprendiendo a cazar e, incluso, provocó una gran polémica en los medios de comunicación. Una de las más críticas fue Yvonne Taylor, la entonces portavoz de la organización PETA, que llegó a considerar impactante y realmente aberrante que una chica tan joven practicase deportes relacionados "con la muerte y la sangre".
Varios medios de comunicación consideraron vergonzoso que Kate emplease este tipo de artes para poder hacerse con el favor de la Familia Real. Hacía muy poco tiempo que la propia Kate había sido fotografiada luciendo un sombrero realizado en piel, lo que provocó una gran protesta por parte de la opinión pública y, con esas imágenes, se confirmaba lo que mucha gente pensaba sobre la joven.
A pesar que en un primer momento se comparó a Kate con Diana, en realidad, no tienen nada en común.
Varios periodistas no dudaron en recordar que la princesa de Gales nunca había vestido pieles y estaba totalmente en contra del llamado deporte de la caza.
Todavía se celebra el Boxing Day en la Familia Real, un día que gira alrededor de la caza
Incluso, Kate se encontró con la oposición de la organización “League Against Cruel Sports”, que lucha en contra de la caza. El hecho de matar ciervos sea un deporte es un hobbie horrible. Aseguran que Kate no es el mejor ejemplo para los más jóvenes del país por su gusto por matar animales y esto no va a ser positivo para su reputación.
El 26 de diciembre, en el conocido “Boxing Day”, es una jornada completa dedicada a la caza por parte de la Familia Real británica. El año pasado, se rumoreó que la propia Meghan Markle le pidió a Harry que no asistiera, ya que la joven es una gran defensora de los animales. Sin embargo, finalmente, sí formó parte. Y, según publicó el “Daily Mail”, Kate sí quiso formar parte a pesar de las numerosas críticas que ha recibido.
