La situación económica de Kiko Rivera está empeorando por momentos dentro de Gran Hermano DÚO. El hijo de Isabel Pantoja decidió dar el paso de acudir a un reality show como GH DÚO con el sueldo más elevado que el concurso paga a una celebridad con la finalidad de saldar sus problemas con Hacienda, pues Rivera ha puesto de manifiesto dentro del concurso las numerosas deudas que tiene con el organismo público y su intención de solventarlas cuanto antes. Por ello, Kiko decidió dejar a sus hijas para adentrarse junto a su mujer, Irene Rosales, en el nuevo reality show de Mediaset.

No recibirá ni un euro de su participación en GH DUO

Sin embargo, el dj no ha recibido una buena noticia y no recibirá ni un sólo euro de su participación en el reality show después de que el Juzgado de Primera Instancia número 18 de Sevilla haya embargado todo el dinero que recibe por participar en Gran Hermano DÚO. Ha sido concretamente El Programa de AR el que esta misma mañana revelaba en exclusiva el embargo de todo el sueldo del dj a través de un documento judicial remitido a Mediaset.

Un juzgado de Sevilla decreta el embargo de su sueldo

En dicho documento judicial, se pone de manifiesto el embargo del sueldo de Rivera, debiéndose la cantidad solicitada de 3.365,80 euros de principal, más otros 1.010 euros en conceptos de intereses y costas.

Además, concretan que dicho embargo será percibido de las cantidades que reciba el ejecutado por su intervención en el programa de Televisión emitido por Telecinco, GH DÚO. Y es que el propio Kiko Rivera confesó públicamente que él no había entrado en GH DÚO para generar ingresos, sino para quitarse las deudas, pues el dj confesó que había derrochado dinero que no tenía durante una etapa en la que sufrió adicción a las drogas.

Confesó el mal momento económico que estaba pasando

Acompañado de su mujer y madre de sus dos hijas, Irene Rosales, confesó que habían pasado por una época muy mala económicamente, pues ni siquiera habían tenido dinero para pagar el alquiler de su casa, y la propia Irene Rosales reconoció que quería trabajar en televisión para poder vivir dignamente.

Ambos revelaron la dura época que habían pasado en la que Isabel Pantoja tuvo que hacerse cargo de pagarle el alquiler de su casa. Además, Kiko confesaba que uno de los peores momentos que había vivido fue cuando no pudo ayudar económicamente a su madre, que necesitaba liquidez para salir de prisión,