Dani Mateo empieza el año 2019 con una gran noticia: la fiscalía ha decidido archivar la denuncia contra el humorista de “El Intermedio” al considerar que el sketch en el que se sonaba los mocos con una bandera de España no era un ultraje al símbolo, sino una incorrección política. Además considera que el momento de “sonarse los mocos” formaba parte de una escena de gran carga crítica o desafiante (hay que recordar que “El Intermedio” es un programa que crItica la realidad política con humor).
No hubo "ultraje" como indicaba el Sindicato alternativo de la Policía
En un escrito que se ha hecho llegar al jurado de Instrucción nº 41 de Madrid, el Ministerio Público considera que el acto que se crítica a Mateo no es más que un sketch con “cierta dosis” de ganas de provocar y debe permitirse la transmisión de este mensaje lleno de crítica ya que está amparado bajo la libertad de expresión. Por tanto, se descarta que se haya cometido un delito de ofensa o de ultraje hacia un símbolo de España o un delito de odio como denunciaba la organización Alternativa de Sindical de Policía.
Dani Mateo fue denunciado por un sketch en el que, tras leer el prospecto de un medicamento contra la gripe, estornuda y se sonaba la nariz con la bandera española.
Según decía en el vídeo no quería ofender a los ciudadanos, ni al rey ni a los chinos que venden este trapo. “No, trapo, no, trapo tampoco” decía el cómico.
La fiscalía considera que ni por el contenido, ni por las circunstancias en las que se realizó, ni por el objetivo que se buscaba, se puede hablar de un trato ofensivo o de menosprecio a la bandera, por lo tanto ni es un delito de odio ni un delito de ultraje.
Además, la actuación del humorista no fue acompañada ni de expresiones o gestos vejatorios, ni por una conducta violenta ni nada que promoviese el desprecio a la bandera.
La cadena borró el sketch de la web por las quejas
A causa de las numerosas críticas recibidas, La Sexta decidió borrar el “sketch” de la web del canal, ya que muchos telespectadores se habían sentido molestos u ofendidos por el mismo.
La Fiscalía insiste que bajo la doctrina del Tribunal Europeo de Derechos Humanos está amparado por la libertad de expresión.
Y precisa que una sociedad democrática debe basarse en el espíritu de la apertura de mente, el pluralismo o la tolerancia. Y las críticas malsonantes, los gestos de mal gusto o las manifestaciones políticamente incorrectas o las exageraciones no pueden quedar fuera de la libertad de expresión. Y el sketch en cuestión no buscaba ni violencia ni venganza, aunque fuera de manera “puntual”.
