La revista 'Qué me dices' ha escrito un artículo acerca de la influencer y ex viceversa Oriana Marzoli, la cual cuenta con más de un millón y medio de seguidores en Instagram. Según el portal, cuando se tiene esa cantidad de personas que están pendientes de tu día a día, muchas famosas suelen tener percances con las personas que las siguen.
Oriana Marzoli critica las redes sociales
El último vídeo de Oriana Marzoli ha sorprendido a sus seguidores. La venezolana ha querido plasmar en él positivismo y buenos deseos para el próximo 2019, pero también ha criticado algo que forma parte de su día a día: las redes sociales y los influencers.
A los influencers con mas seguidores las grandes marcas suelen pagarles para que promocionen determinados productos en sus fotografías publicadas en Instagram vendiendo también una imagen. Oriana ha hecho una crítica sobre esto en su canal de Mtmad, a pesar de que ellos se ha dedicado a esto, afirma que muchas veces esas fotografías no son lo que parecen
Oriana confesaba a sus espectadores que hacía poco había un anuncio en el que a la gente le preguntaban por las redes sociales y la fama y sabían contestar a todo, pero a la hora de preguntarle por su familia no sabían nada y culpaba de todo ello al teléfono móvil y las redes sociales. Oriana decía que era la primera a la que le encantaba Instagram, Twitter Facebook...
para poder llegar a sus seguidores y conocerlos, pero que muchas veces son ellos mismos los que le dan más importancia a su contenido que ella misma.
Desvela que ella misma ha vendido una mentira
La venezolana continuaba diciendo que las redes sociales podían hacer también mucho daño y que no comparasemos siempre lo que vemos en esta red concla vida porque no siempre es real, que a muchas personas le pagan por hacerse ese tipo de fotos y que incluso ella llegó a sentir que hacía ese tipo de cosas por dinero y por dar una imagen al mundo que no era verdad.
Ponía de ejemplo una relación que tuvo que parecía muy bonita por las fotos, pero que en realidad no era así. Dice que no había química, ni pasión y para ella fue una farsa lo que había estado vendiendo. Oriana pidió que no se frustrase nadie desvelando así la gran mentira que había vendido sus seguidores durante muchos años.
Esto sirvió para mandar un mensaje a todos sus seguidores diciendo que el mundo era un filtro y que le daba mucha pena haber caído ella misma incluso en el "postureo barato", como lo llamó.