SOS Racismo Madrid ha decidido finalmente denunciar a ‘GH VIP 6’ por los "continuos" comentarios xenófobos y discriminatorios que, según esta ONG, se vienen escuchando desde que diera comienzo la presente edición del reality show de Telecinco.

Lo hace después de advertir hace unas semanas en las redes contra los insultos "racistas" proferidos por algunos de los concursantes contra sus propios compañeros de concurso. También invitó a los seguidores del formato a que de forma anónima enviaran sus quejas a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, facilitando para ello el enlace del organismo público en Twitter.

Denuncia contra Telecinco ante la CNMC y la FAPE

"En mi pueblo, el que limpia los váteres es árabe", "peruana de mierda", "vete a hacer kebabs" o "vete a tu país" son algunas de los comentarios que los espectadores del programa conducido por Jorge Javier Vázquez han podido oír de boca de ciertos habitantes de la casa de Guadalix de la Sierra, algunos ya expulsados por la audiencia.

Cuatro de los participantes que aún quedan en 'GH VIP' tienen sus orígenes fuera de España.

Miriam Saavedra y Mónica Hoyos proceden de Perú; Tony Spina, de Italia; mientras Asraf Beno es de ascendencia árabe. Los destinatarios de las expresiones racistas han sido, principalmente, Miriam y Asraf.

La asociación dice que las actitudes y comentarios racistas se han venido produciendo durante "semanas" sin que Telecinco ni 'GH VIP 6' hayan tomado ninguna medida para evitar o censurar los insultos xenófobos.

SOS Racismo asegura a través de su página web haber recibido más de medio centenar de denuncias contra la cadena y contra el espacio producido por Zeppelin.

Todos estos motivos han llevado a la ONG a presentar una denuncia formal contra Telecinco y 'GH' ante la CNMC. También se ha quejado ante la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE).

'Se exceden los límites de la libertad de expresión'

El presidente de la organización, Mikel Mazkiaran, afirma que las expresiones vertidas "exceden los límites de la libertad de expresión", siendo meras descalificaciones por "origen étnico o procedencia". SOS Racismo no entiende que no se haya atajado la situación "de forma automática por parte de la empresa".

Por ello, anima a Mediaset a poner en marcha su propio código ético, que el grupo audiovisual suele promocionar con distintas campañas de sensibilización.
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