La vida de los personajes famosos de Hollywood no es muchas veces como todos piensan, algunas veces el panorama se torna gris para ellos. Como lo es el caso del afamado actor Charlie Sheen, quien en su momento era uno de los mejores pagados en la gran pantalla. Su participación en la serie Dos hombres y medio lo hizo acreedor de casi dos millones de dólares por capítulo.

En estos momentos el actor pasa por una mala racha, ya que afirmó que se encontraba en la lista negra de la industria del Cine, por lo que no encontraba empleo.

Alegatos del actor

La revista People ha obtenido información importante referente a Charlie Sheen, y es que este solicitó el cambio de custodia de sus cuatro hijos menores. Recordemos que el intérprete tuvo 5 hijos, de los cuales 4 son menores de edad. Samantha, Lola, Max y Bob, todos ellos fruto de dos matrimonios diferentes. Los primeros son hijos de este con la actriz Denise Richards y los dos últimos son unos gemelos procreados que tuvo junto a Brooke Mueller, también actriz.

El actor aseguró haber caído en una mala situación económica, puesto que no podía encontrar un buen empleo que le produjese ingresos. El mismo comentó que estaba en la lista negra de la pantalla grande, así que consideraba que estaba en la penuria.

Charlie Sheen informó que por el momento solo contaba con un poco menos de 10.000.000 de dólares, cifra irrisoria para el actor.

Como si fuera poco el hombre de 52 años comentó que también mantenía deudas con Hacienda, además de mantener deudas con personas que le han prestado servicio de mantenimiento a su jardín y piscina.

Todos estos argumentos son los que han llevado al intérprete a solicitar el cambio de custodia.

Estado de salud de por medio

Charlie Sheen estuvo un tiempo en rehabilitación en el año 2011, desde allí su vida comenzó a ir en picado. Después de participar en la serie Dos hombres y medio y percibir un pago por capítulo de casi 2 millones de euros, fue despedido por insultar al creador de la misma.

Para esa temporada también se dio a conocer que era portador del virus VIH, a pesar de que trató de que la noticia no saliese a la luz. A raíz de su enfermedad recibió muchos chantajes, en los cuales perdió mucho dinero.

Después de esta serie de circunstancias tuvo que alejarse de la vida lujosa a la que estaba acostumbrado, vendió varias de sus casas y compró una propiedad más pequeña que lo alejara aún más de la gran pantalla. Por el momento le queda su mansión en Beverly Hills, la cual puso en venta por una suma de casi 10.000.000 de dólares, pero que hasta el momento no tiene comprador.