Mila Ximenez y Alessandro Lecquio inician una guerra sin cuartel. Hacía mucho tiempo que no asistíamos a guerras internas entre los programas de Telecinco, pero una vez más, Alessandro Lecquio ha arremetido contra alguien de Sálvame. A cuentas de la relación de amistad entre Mila Ximénez y Mónica Gil Manzano (la supuesta estafadora de famosos), el italiano ha puesto toda la carne en el asador para darle duro y con todo a la colaboradora de la tarde.

Sólo las tontas (o las estafadoras) caen en las estafas

Todo empezó por la mañana donde el Conde, a cuentas de un artículo de Mila Ximénez en su blog de Lecturas, relatando su experiencia con Mónica Gil Manzano, acusada de presunta estafa a varios famosos y amiga de la colaboradora.

Durante toda la semana, Mila ha reconocido que la conocía y se ha erigido en defensora de los estafados.

Sin embargo, y a pesar de reconocer haber intentado ser estafada, la sevillana no admite réplica incluso cuando su propio programa ilustra sus relatos con fotos donde salen juntas mostrando una relación cómplice. Esto le ha servido a Alessandro Lecquio para destrozar a Mila con estas palabras: “Los hoy estafados hace dos días presumían de ser los más listos, insisto, la teoría del timo de la estampita, el estafador estafado”.

La respuesta no se ha hecho esperar

Esa misma tarde y por si acaso se hubiera querido insinuar algo más, Mila Ximénez se defendió con uñas y dientes atacando donde más duele.

"Yo soy una víctima y tú defiendes a los estafadores porque eres uno de ellos, un estafador emocional".

Así y con un discurso lleno de eufemismos sobrevolando el plató, Mila acusaba a Alessandro de haber sido mal padre y mala pareja y de una posible denuncia si seguía llamándola estafadora cuando ella se considera víctima. Finalmente, le ha terminado llamando títere diciendo que el solo habla por la voz de su amo.

¿A quién se referirá?

Polémicas que vienen de lejos

Aunque no es la primera vez que Alessandro Lecquio ataca a alguien de Sálvame desde El programa de Ana Rosa, sus dardos siempre se habían centrado en la "princesa del pollo" Belén Esteban (nombre con el que la bautizó una vez). Lo que no muchos recuerdan es que la relación entre Mila y Lecquio viene de 15 años atrás en las madrugadas de Crónicas Marcianas, donde ambos formaban parte de la mesa de corazón del programa.

Uno de los grandes escándalos fueron las cartas entre Mila y la fallecida locutora Encarna Sánchez que llevaron a la primera a abandonar el programa entre las criticas del conde italiano, entre otros. Posteriormente, mantuvieron una relación correcta cuando trabajaron juntos en el Día a Día de Carolina Ferre (2004) para volverse a tirar pullitas puntuales a lo largo del tiempo.