Después de 3 meses en Honduras, Lara Álvarez se presentó muy glamorosa en el plató de Supervivientes. La presentadora llegó con vestido ajustado al cuerpo de la casa italiana Chiara Boni la Petite Robe y tacones de la firma Úrsula Mascaró, dejando atrás los atuendos étnicos que lucía en la isla.

En el plató, acondicionado por la productora Mediaset para transmitir el encuentro de los exconcursantes de Supervivientes, se encontraban todos los que han pasado por el Reality show menos Sofia y Logan, quienes se enfrentarán finalmente para llevarse el premio de 200.000 euros.

Luego de su majestuosa entrada, la presentadora bromeó con los asistentes y visiblemente emocionada les dijo que los veía a todos guapísimos.También los felicitó por haber superado esta aventura, con esfuerzo y sana convivencia, por su lucha en los juegos y por toda la repuesta que han tenido de los espectadores.

La animadora recibió a Raquel Mosquera y Sergio Carvajal, los penúltimos Supervivientes que salieron en helicóptero desde las paradisíacas tierras de Cayos cochinos, ubicados al noresete de Honduras.

El zasca de la Lara Álvarez a Jorge Javier Vázquez

Lara Álvarez estaba muy emocionada por sus reencuentros con los participantes del reality. La periodista reveló que en cada despedida llora mucho y la pasa fatal.

Confesó que antes de regresar a España se enfrentó a esa contradicción de querer volver a reencontrarse con sus seres queridos y la nostalgia por dejar un lugar maravilloso donde se vivieron momentos únicos.

El presentador de Telecinco, Jorge Javier Vázquez, le dio la buena noticia de que esta edición ha sido la mejor del concurso, por lo que la asturiana lo animó a ir en la próxima jornada, especialmente para contemplar los espectaculares atardeceres.

Entre bromas y risas, el presentador le preguntó a Lara cuál había sido el concursante que más “penita” había dado, la animadora lanzó un zasca a su compañero y amigo Jorge Javier a quien le hizo saber que el más pesado y “pejiguero” de esta edición ha sido él.

Nuevos aires para Lara Álvarez

Hay rumores de que en los próximos días la hermosa asturiana de 32 años concrete su relación con quien pudiera ser su nuevo amor, el empresario argentino Edu Blanco, de 40 años.

La pareja se conoció durante las grabaciones del programa de aventuras Planeta Calleja en el 2017, donde el sureño la ayudó para cumplir su reto en el rally de la Baja 1000, donde terminaron en tercer lugar de la carrera.

A pesar de que se ha dicho que Edu es el chico que aparece en el reflejo de las gafas de sol de Lara en la imagen donde muestra su tatuaje en forma de corazón, en su cuenta de Instagram @laruka, la pareja ha sido muy discreta porque no han confirmado los rumores. En los próximos días se sabrá.