Las asperezas comienzan a florecer luego de mucho tiempo. Los viejos sentimientos que se desarrollaron durante la competencia de la edición del año pasado de Operación Triunfo al parecer siguen latentes. Pues lo pasado en el plató televisivo de esta nueva edición de Bailando con las Estrellas no ha sido para menos.

Por lo observado en la noche del martes 22 de mayo en las primeras eliminatorias de Bailando con las estrellas 2018, la tensión se trata de una evidente envidia de Ana Guerra hacia su compañera de escenario, Aitana.

¿La supuesta buena relación de este dueto será solo una actuación para el público?

¿Existirá una relación tensa entre estas dos jóvenes artistas?

Los resentimientos de Ana Guerra

Ana Guerra y Aitana, quienes salieron de Operación Triunfo 2017 siguen con su éxito ‘Lo malo’, sencillo con el que competirían para la entrada en Eurovisión 2018; puesto que ganarían el dueto Amaia y Alfred. Sin embargo, esto no ha de molestarles mucho a las jóvenes, pues se ha convertido en la sensación del momento en los clubes nocturnos de España, sobre todo desde el lanzamiento del vídeo musical el mes pasado. Tanto ha sido que han sido invitadas para una presentación en las primeras eliminatorias de Bailando con las estrellas.

La presentación de Aitana y Ana Guerra ha ido espectacular, además de haberle enseñado el baile de la canción a Roberto Leal, presentador del programa.

Sin embargo, la tensión se ha hecho presente en el plató televisivo, luego de la presentación de las jóvenes artistas. Rafael, quien también había sido presentador de Operación triunfo 2017, les indicará que abandonaran el escenario, pues ya era hora de anunciar qué pareja sería eliminada del concurso. A esto agregó que si se acordaban de esos tensos momentos estando en el programa del que provienen.

A lo cual Ana respondió que ella sí podía acordarse, más Aitana no, pues ella corrió con la muy buena suerte de nunca haber sido puesta en peligro de eliminación.

Aitana aligera la atmósfera

El comentario puso bastante tenso al escenario del programa, pero no duró mucho tiempo. Rápidamente Aitana se defendió del comentario de su compañera, diciendo que a pesar de nunca haber sido nominada para la eliminación, aun así sufría bastante en el programa, y que más de una lágrima derramó durante el concurso.

Así se aligeró la atmósfera en el escenario, pero ahora la pregunta es si la relación entre estas dos cantantes será tan buena como parece o si será tan tensa como se mostró en Bailando con las estrellas.