El nombre Rodney King es muy prominente en la comunidad afroamericana que siempre será recordado, especialmente para los residentes de Los Ángeles, California durante el año de 1992. El National Geographic Channel tiene ahora un nuevo documental titulado "LA92" que documenta lo que sucedió antes del asalto viral de Rodney King en 1992 por el departamento de policía de Los Angeles.

Además de resaltar la importancia del caso de Rodney King, "LA92" arroja una luz valiosa sobre el caso de la estudiante de secundaria de 15 años, LaTasha Harlins, que fue asesinada después de ser acusada de robar leche de una tienda de la esquina de su barrio en 1992.

Esta perspicaz película también introduce la controversia detrás del uso de tasers por parte de las autoridades.

¿Quién es LaTasha Harlins?

Los disturbios de 1992 fueron tan malos que, sin embargo, ayudaron a arrojar luz sobre un problema de décadas entre las fuerzas del orden y los civiles. Muchos solo recordarán los disturbios de 1992 que se produjeron cuando los oficiales fueron declarados inocentes luego de que se viera el vídeo viral en todo el mundo, donde aparecen los policías golpeando a Rodney King, pero también hubo muchos otros eventos que ocurrieron en esa época.

LaTasha Harlins era una estudiante de secundaria de quince años que vivía en Los Ángeles, California en 1992. Una tarde, entró en una tienda de la esquina para comprar cosas para sí misma como cualquier otro cliente, pero nunca tuvo la oportunidad de hacerlo.

Harlins fue asesinada a tiros, a quemarropa, por la dueña de la tienda coreana después de haber sido acusada de robar leche. Harlins estaba dentro de la tienda todo el tiempo y nunca salió de la tienda con ningún artículo.

La importancia del vídeo

De hecho, todo el incidente fue captado en vídeo, sin mostrar ninguna mala acción por parte de Harlins todo el tiempo que estuvo dentro de la tienda.

Lo que muestra la evidencia en vídeo es que la dueña de la tienda coreana le disparó a una cliente de quince años en la parte posterior de la cabeza mientras se alejaba. Con esta evidencia, un jurado condenó a la propietaria de la tienda de asesinato y recomendó una sentencia de 15 años de prisión. Pero el juez del caso no vio esa frase en particular como apropiada para el crimen. En cambio, anuló la condena y condenó a la dueña de la tienda a una multa de 500 dólares, cinco años de libertad condicional y 400 horas de servicio comunitario por asesinato de LaTasha Harlins.