La relación de los protagonistas de Sálvame con la cirugía estética es de lo más llamativo. Si bien es cierto que los retoques estéticos están cada vez más en boga para el conjunto de la sociedad, lo que sucede entre el mundo de los famosos en general y entre los rostros más conocidos del programa de corazón decano de la Televisión española no es ya tan normal.

Y es que estos rostros conocidos cada vez lo son menos a golpe de visitas a las clínicas de estética más reputadas de la capital de España como a la que acudía esta pasada semana Belén Esteban para realizarse distintos tratamientos con el objetivo de revertir el paso del tiempo y mejorar el aspecto de la piel y sus labios y como el que visitaba en su momento Paz Padilla para reafirmar sus pechos.

Ni hablar de las incontables operaciones de estética a las que se ha sometido Jorge Javier Vázquez, quien en más de una ocasión ha reconocido haber perdido la cuenta de tantas que lleva tras haberle cogido "el gustito" al quirófano o de las que han llevado a cambiar la expresión por completo de otro de los pesos pesados de este mismo espacio como sucedió con Mila Ximénez hace apenas unos meses.

Camino que quién sabe podría seguir también la protagonista de esta nueva historia de retoques en busca de la eterna juventud como es María Patiño, quien hace unos meses era protagonista por un asunto similar después de confirmar a los medios de comunicación lo que era evidente a los ojos de todos los que hubieran visto sus últimas fotos playeras.

Es decir, que se había sometido a una imponente operación de aumento de senos que, por fin, le había quitado el complejo que arrastraba desde hacía años.

Pues bien, ahora, tal y como recogen nuestros compañeros de la revista Semana, la periodista gallega ha vuelto a dejarse caer por su cirujano de confianza para hacerse una serie de arreglitos que, como esta misma aseguraba al preguntarle por ellos en anteriores ocasiones, no son los primeros ni posiblemente los últimos.

El antes y el después de Patiño

De hecho solo hay que fijarse en las fotografías de las primeras apariciones televisivas de la colaboradora de Sálvame en Canal Sur para darse cuenta que poco o nada queda de la expresión que esta lucía cuando era una veinteañera.

Ahora, más mayor, pero con unos pómulos más prominentes, con una nariz completamente renovada, con unos senos mucho más llamativos y una piel si cabe más lisa está divina. Veremos si reconoce en público de qué se trata.