La última emisión de Sábado Deluxe ya es historia, desgraciadamente, de la televisión reciente. Lo es de la mano del bochornoso cara a cara que enfrentó a María Lapiedra con dos de las colaboradoras de Sálvame más críticas con sus recientes líos sentimentales como son María Patiño y Gema López.
Un culebrón que ha polarizado y mucho las posturas de unos y que provocaba que la tensión se mascase en el plató central de Telecinco desde el minuto uno en una emisión en la que las protagonistas pronto empezaron a perder las formas de la peor manera posible.
La primera que tomaba por el mango el hacha de guerra era la periodista María Patiño.
Esta abría la caja de los truenos asombrada de que la colaboradora de Cazamariposas le hubiera llamado "zorra", algo que aseguraba no tenía por qué "soportar". Era entonces cuando Lapiedra trataba de interrumpirla para dar su versión sobre este supuesto insulto que Patiño no respetaba para agregar que si hubiera sido ella la que lo hubiera hecho, "en público o en privado", la hubiesen "machacado", ya que se habría dicho de ella que juzga a las personas por su "forma de vestir o por su pasado", en referencia a los años de actriz de cine para adultos de la invitada.
Era entonces cuando la cosa se empezaba a calentar más de lo debido, desvelando que la causa de la mala relación de esta con la periodista gallega vendría de la mano de unas declaraciones de María en las que esta habría acusado a Lapiedra de inventarse unos "malos tratos" hace una década con Ramiro Lapiedra sumando a esta grave acusación que, según sus palabras, para inventarse tal historia María Lapiedra habría cogido un bate para "golpearse la cabeza" y "después denunciarlo".
Apoteósico Deluxe de la mano de las dos Marías
Ya con los tonos por los aires, María Patiño retomaba la palabra para opinar que era "deleznable" que alguien acudiese a la televisión a vender unos "malos tratos" haciendo "espectáculo" de ello, y dijo que si por eso ella era una zorra "¡pues soy una zorra!", rebajando el ya paupérrimo nivel del programa a niveles insospechados.
Con Jorge Javier Vázquez tratando de que el programa no se le fuese más de las manos los cruces de gritos, insultos y malas palabras continuaron hasta que el tiempo consiguió que la guerra que estas dos Marías llevan librando varias semanas en los platós de Telecinco quedase en paréntesis hasta que vuelvan a juntarse, claro está, con un cheque de por medio.