Cuando parece que está a punto de cerrarse uno de los años más duros de su vida, Toño Sanchís sigue siendo toda una máquina de generar titulares cada vez que abre la boca y, antes de que termine este infausto 2017, ha querido señalar al que todo apunta se convertirá -si no lo es ya- en su nuevo enemigo para este 2018.

El nuevo integrante de esta lista no es otro que un nuevo colaborador de Sálvame como es Gustavo González con quien, según se desprende de sus últimas declaraciones, habría mantenido un vínculo mucho más cercano de lo que podría parecer a través de una tercera persona que hace ya tiempo ha querido salir a la palestra para ganar su minuto de fama y la correspondiente suma asignada a ello atizando al representante de famosos en los medios.

Y es que, para aquellos que estén más despistados en relación a las últimas noticias que afectan al valenciano más allá del recurso que este habría interpuesto para evitar tener que pagar casi medio millón de euros a la Princesa del pueblo, hace unas semanas este era denunciado por la que fuera su asistenta del hogar en un movimiento que el levantino habría acusado al intento de ganar más dinero del que ya habría conseguido esta a costa de los Sanchís.

Las acusaciones no eran menores. La chica de la limpieza que habría trabajado en la casa familiar de este les acusaba de no haberle dado de alta en la Seguridad Social para trabajar o, lo que es lo mismo, de haber estado trabajando en negro, lo que puede acabar siendo un nuevo lío judicial de primera para Toño.

Una demanda inesperada para este que le dejaba petrificado tanto a él como a su mujer, dado que no les cuadraba con la personalidad de esa persona que, al parecer, habrían conocido tan bien -o eso creía- durante tantos años y que ahora se revelaba como una nueva enemiga en un mar de problemas para ellos.

Más líos judiciales para Toño Sanchís

Algo que les llevaba a sospechar que quizás habría alguien detrás de ellas. Eso sí, en un principio prefería no dar nombres y empezar a investigar quién podría haberle convencido de que hiciera lo que sería ya una querella en curso que solo un juez podrá dirimir en favor de la parte demandante, o en su defecto de la demandada.

Si bien hasta ahora había tratado de mantener en silencio esa persona que habría estado moviendo a su ex empleada del hogar como una marioneta, el otro día se atrevía a revelar su nombre en Radioset: "Quien está detrás de la denuncia trabaja en Sálvame y es Gustavo González". Una grave acusación que podría llevarlo, una vez más, al banquillo.