Cuando parecía que las aguas bajaban relativamente más tranquilas por los ríos de la cadena de Fuencarral en general y por el plató de Sálvame en particular, la colaboradora más lenguaraz, indómita y con más carácter de programa de corazón decano de la televisión española se descolgaba en pleno programa con un alegato contra su ya ex compañero Kiko Matamoros que va a dar mucho que hablar.

Y es que las palabras de la periodista, que aseguró que durante un tiempo le "daba pena", pero que ya no siente ni un mínimo de compasión por su persona dado que no le tiene "ningún aprecio" habiendo pasado a "disfrutar" con los ataques que recibe, podrían llegar a tener respuesta en breve por parte del ex colaborador de Sálvame...

o bien en la televisión o bien en un juzgado.

Después de recordar que si ese señor o su señora coincidían en televisión con ella, ella se iría automáticamente, quiso hablar de la inquina que tiene una persona que calificó como "reventada" trayendo a la memoria dos pasajes, en este caso relacionados con los dos reality show más importantes de la cadena como son Gran Hermano y Supervivientes.

En relación al primero, espetó Mila, cuando entró Belén Esteban este quiso mover ríos y montañas para que alguien de su familia también accediera a esa edición. Algo que no conseguiría pero que, al año siguiente, acabaría con la entrada de dos de sus hijos y el triunfo de una de ellas.

En relación al segundo, este, al parecer, no asumió en ningún momento que su compañera Ximénez pudiera llegar a conseguir un hueco en Supervivientes.

Máxime cuando al enterarse este se ofreció tanto él "como a su señora" para que los Matamoros no se quedasen fuera del juego mediático, según palabras de Mila. Tras enterarse, la ex mujer de Manolo Santana se puso firme y fue ella quien vetó la presencia de alguno de ellos en el programa, tal y como recordaba.

El durísimo alegato de Mila contra Matamoros

A partir de ahí se empezó a agrietar una relación hasta el punto de que ciertos comentarios cruzados han acabado en los juzgados, estando todavía pendientes de juicio.

No obstante, las declaraciones más fuertes de Mila, en forma de insinuaciones de primera magnitud, llegaron al final de su alegato contra Matamoros.

Después de destapar que la personalidad que ha vendido es una gran mentira quiso advertir de que sus allegados "se fían muy poquito de las gestiones económicas de Kiko".

Como guinda, Mila quiso preguntarle en antena "cuánto cobra y cómo lo cobra", deslizando asuntos turbios que podrían suponerle un agravamiento en su relación con Kiko... y por qué no, una nueva denuncia.