Dicen que aguantar carros y carretas sobre tu pasado o tu vida personal y financiera está incluido en el jugoso contrato que te liga a Sálvame y que te asegura un asiento a lo largo de una temporada en uno de los buques insignia de Telecinco.
Lo que para muchos es, simplemente, una penitencia para disfrutar de una fama y un estilo de vida muy por encima del de la mayoría de "curritos" patrios, para otros es una situación que se hace insoportable y que les lleva a bajarse del barco como ya sucediera con Rosa Benito, Raquel Bollo, Karmele Marchante o más recientemente con Kiko Matamoros.
Algo que, quizás, le pase antes que después a una de las últimas en unirse al club del programa de corazón vespertino de Telecinco como es Terelu Campos, quien desde que arrancase la que es su primera temporada como tertuliana titular en Sálvame no ha dejado de compaginar su labor como comentarista con el de protagonista de ciertas informaciones propias y de su familia.
De hecho, era hace unos días cuando comentábamos que la hija mayor de María Teresa Campos estaba más que indignada sobre cómo su vuelta al ruedo mediático estaba afectando a su hija Alejandra, todavía menor de edad por unos meses, contra su voluntad criticando así la profesionalidad de algunos de sus compañeros.
Pues bien, ahora, otro compañero, o mejor dicho ex compañero, como es el caso de Kiko Matamoros, ha apuntado directamente hacia su persona después de que ésta se atreviese a calificar el abandono de su lugar en Sálvame como una "salida por la puerta de atrás", lo que, como era de esperar, no ha gustado nada al madrileño.
Tanto es así que, desde su atalaya, desde la que se hace oír a través de otros miembros del programa amén de las redes sociales, Matamoros abría un melón que Terelu quería que permaneciese cerrado desde hace tiempo y hasta el final de sus días. Un melón que pone en tela de juicio su profesionalidad y sus logros en la televisión.
Terelu y "la cláusula" de María Teresa Campos
Hablamos de una información que habla de que Terelu era denominada -y algunos seguirían llamándola así en privado- como "la cláusula" en relación a los requisitos que su madre ponía en sus contratos con las cadenas televisivas y que, presuntamente, obligarían a contratar también a su hija.
Algo que recordaba Kiko espetando con contundencia sobre su salida y sobre Terelu que “lo importante en la vida es entrar y salir por la puerta principal, no por la puerta de servicio. A mí no me lleva mi mamá de la mano a trabajar”.