Que Jorge Javier Vázquez no está pasando por su mejor momento profesional es un hecho. Tras el retorno de sus vacaciones todo parecen ser malas noticias en diferentes flancos, a cuál más temible.
El primero de ellos es el que sostiene todo proyecto televisivo y a los profesionales que trabajan en él: La audiencia. Tras firmar la peor edición de Gran Hermano en términos de cuota de pantalla con Gran Hermano 17, el inicio de Gran Hermano Revolution parece estar superando por lo bajo a GH 17 lo que, tratándose de uno de los programas más importantes de Mediaset España habría hecho que los focos se pusiera sobre él.
Como una cosa lleva a la otra, esta situación habría conducido, según distintos mentideros que tratan sobre la crónica televisiva en nuestro país, a avinagrar la relación de uno de los conductores mejor pagados de la cadena de Fuencarral con sus jefes. Y es que basta que tu trabajo empiece a dar peores resultados y la situación se alargue en el tiempo para que empieces a ser cuestionado.
Por si esto fuera poco, los compañeros de Look sorprendían esta semana comentando que el presentador catalán habría tenido un encontronazo de primera magnitud con la productora que se encarga de la realización de otros dos espacios tan importantes para Telecinco como son Sálvame y Sábado Deluxe, donde este es una las grandes estrellas.
El reparto de funciones y el asunto referido a los ingresos por los anuncios personalizados de los presentadores durante el programa habrían llevado al de Badalona a plantar a La Fábrica de la tele hasta que no se llegara a un acuerdo en este sentido. Y es que ya se sabe que con cosas de dinero no se juega.
Todas estas razones, unidas a la más importante, el desapego de una gran parte de la fiel audiencia de Telecinco, que podría haber empezado a demostrar con el mando de la televisión que Jorge Javier empieza a desgastarse a nivel televisivo, podrían haber puesto un pie de JJ fuera de Telecinco.
El "año horribilis" de Jorge Javier Vázquez
Si bien es cierto que las cosas parecen estar peor que nunca para sus intereses, la posición de Jorge Javier Vázquez en Mediaset España, salvo giro inesperado en las relaciones que este mantiene con sus gerifaltes a raíz de los datos de audiencia en las próximas semanas, no parece que puedan llegar a tener consecuencias a corto plazo. Tendrán que torcerse mucho para que una estrella como él abandone una televisión hecha a medida para su forma de trabajar.