Rocío Carrasco está dispuesta a todo, con tal de ganar la batalla legal que tiene con el que fuera su marido y padre de sus dos hijos Antonio David Flores.

La primogénita de la ya fallecida, Rocío Jurado quiere demostrar a toda costa que dice la verdad

Hace apenas dos meses que comenzaba el mediático juicio. Rocío Carrasco demandaba a Antonio David por no haber respetado la custodia compartida y haber recibido un supuesto maltrato psicológico por parte del que fuera su marido durante un periodo de tiempo. Unas acusaciones muy graves que podrían llevar al ex guardia civil a la cárcel en el caso de poderlo demostrar.

Por esta razón, ha decidido solicitar a la audiencia un testigo de todo lo que le ha ocurrido durante estos años, y que no es otra que su prima Chayo Mohedano.

Ambas primas, han mantenido siempre una estrecha relación familiar, siendo la cantante, al parecer, testigo de muchos de los acontecimientos vividos al lado de la joven pareja. Chayo Mohedano es la única que se ha mantenido cerca de Rocío desde que ésta, por voluntad propia, decidiera por alguna razón se que desconocemos, alejarse de los demás miembros de la familia, entre los que se encuentran Amador Mohedano, Rosa Benito, padres de Chayo, sus hermanos Gloria Camila y José Fernando y demás familiares del clan Jurado.

Antonio David sigue manteniendo relación con una gran parte de la que fue su familia política

Desde el momento en que comenzara su relación con Rocío Carrasco, el ex guardia civil formó parte de la familia. La relación con ellos iba bien hasta que la pareja decidió divorciarse. Tanto Rocío Jurado como el resto de los familiares se posicionan del lado de una joven Rocío que además ya tenía dos hijos Rocío y David.

El destino de la familia cambiaría a raíz de fallecer la tonallidera después de paceder un cáncer de páncreas que le fue diagnosticado y que acabó con su vida. Durante el tiempo que duró la enfermedad de "la mas grande", se mantuvieron unidos junto a José Ortega Cano. Poco a poco, y según comentan algunos medios de comunicación, fue a raíz de la lectura del testamento cuando comenzaron los problemas entre ellos por las participaciones que les correspondieron a cada uno, desde entonces ya nada fue lo mismo.

Rocío Carrasco guardó silencio mientras Rosa Benito y Amador Mohedano comenzaban acudir a programas de televisión para contar, entre otras cosas, como fueron los últimos días de Rocío Jurado.

¿Sería este otro de los motivos por los que Rocío no quiso saber nada de ellos?