El ex monarca Juan Carlos I vuelve al foco de la polémica. Y es que, desde que no se le viera junto a su familia en Palma de Mallorca, todos los focos estaban alerta sobre su lugar elegido para pasar las vacaciones. Pero fue OkDiario el medio que filtraba hace unos días la noticia sobre su estancia en Irlanda, la cual ha generado bastantes controversias que han envuelto al Rey emérito.

Era el polémico diario de Eduardo Inda el que revelaba en exclusiva las imágenes de Don Juan Carlos junto a su amiga especial, la empresaria e interiorista Marta Gayá.

De este modo se zanjaban las dudas sobre el paradero del ex monarca, que este verano no ha pisado Marivent como antaño y lo ha cambiado por la costa gallega de Sanxenxo y un pueblo de Irlanda. Dos destinos que nada tienen que ver con los años anteriores.

El ex Rey de España pasa la noche en un castillo

Por otro lado, ha sido El Español el medio que revelaba en exclusiva que el Rey emérito pasaba la noche junto a Gayá en un castillo situado en Westmeath, el castillo de Killua. Fue tras la inauguración de la iglesia a la que ambos asistieron en Clonmellon cuando se hospedaron en el castillo.

En la actualidad, se trata de una famosa fortaleza gótica que cuenta incluso con su propio cementerio y unos pasajes secretos que terminan en unos jardines.

Sin embargo, hace algunos años se encontraba en ruinas. Eso sí, el castillo es propiedad de un amigo de Don Juan Carlos llamado Kraus.

Esta es una de las últimas noticias sobre el ex monarca que, sin duda, dejan patente la completa apatía con su actual esposa, la Reina Sofía, y su total retirada de la vida pública desde su abdicación.

Eso sí, hay quienes afirman que la empresaria Marta Gayá ha sido su amiga especial durante 30 años.

La ausencia de Juan Carlos I al aniversario, el principal motivo

No obstante, hay otros medios que atribuyen esta drástica actitud de Don Juan Carlos a no haber sido invitado al aniversario de las primeras elecciones de 1977. Una fecha señalada a la que acudió su hijo, el Rey Felipe VI, junto a su esposa, la Reina Letizia, fue cuando se supo de su malestar al no recibir invitación.

En definitiva, parece que el Rey emérito ha encontrado refugio en la decoradora interiorista Marta Gayá, una antigua amiga de la que hacía más de 10 años desde que no se dejaban fotografiar juntos. Ahora, la vida del ex monarca ha dado un brusco giro de 180 grados alejado de las cámaras y de la Familia Real durante el período estival.