Pocas cosas hay seguras en la vida pero una de ellas es que Ana Rosa Quintana ha tomado la mejor decisión cuando hizo la maleta, dijo adiós y se fue a disfrutar de sus bien merecidas vacaciones de verano y esto no se dice sin un motivo. Hay alguien que ha tenido mucho que ver para que esta afirmación sea veraz y es nada más y nada menos que el conde más polémico de la Televisión: Lequio.

Un mal momento para "El programa de Ana Rosa"

Lo cierto es que El Programa de Ana Rosa está pasando por un buen momento y es que la reina de las mañanas ha tenido muy buen ojo para elegir sucesor, cuando el calor comienza y ella se retira hay que guardar todo lo conseguido en invierno y en estos casos la experiencia vale más que cualquier otra cosa y por ello confía en Joaquín Prat para el conocido programa del verano que cambia su nombre por la estación estival.

Y nada mal lo está haciendo el compañero ya que mantiene muy bien el tipo frente a la competencia y este lunes ha liderado la franja mañanera con más de diecisiete puntos de cuota de pantalla. A simple vista parece que las cosas van bien, Ana Rosa se está relajando y Joaquín Prat, en su lugar, está manteniendo y realizando el trabajo que ella dejó a medias. Todo correcto pero las cosas no son tan bonitas como parecen y ha tenido lugar un serio problema en el plató.

Polémica en el plató de Ana Rosa

Y lo que ha tenido lugar entre otras cosas ha sido el estallido brutal que ha tenido en directo Lecquio que ha perdido totalmente a los papeles con sus compañeros Blázquez y Pepe del Real. Montó en cólera cuando salió a relucir un tema de Isa Pantoja y su pareja Alejandro Albalá.

El momento se produjo cuando se estaba comentando la entrevista que concedió la madre de Alejandro Albalá, Paz Guerra, en el programa Sábado Deluxe. Pepe del Real afirmaba que ella tenía un as en la manga en referencia a sus últimos comentarios y en ese momento fue cuando Lecquio se enfrentó a su compañero en pleno directo diciéndole a gritos que si tener un as en la manga no era sucio para él, que otra persona habría salido huyendo y que no quería saber nada de él.

Y la cosa no se quedó ahí, Martín Blázquez quiso intervenir y Lecquio la cayó acusándola de querer montar un "numerito". Tal fue la bronca y la manera de hablar que tuvo Lecquio en directo una actitud tan brava y totalmente fuera de sí que poco más se pudo hacer para quitarle importancia por mucha broma que intentaran hacer. Sus dos compañeros acabaron diciéndole que el conde lo que necesitaba eran unas vacaciones urgentes para relajarse.