Y por fin llegó el día en el que María Teresa Campos accedió a llamar a Supervivientes 2017 y a tener una conversación con su novio, el concursante Bigote Arrocet.
A diferencia de lo que sucedía en la última ocasión en la que el programa vino advirtiendo desde distintos espacios que la veterana conductora acabaría hablando por primera vez, desde que sufriera el ictus, con Bigote, en esta ocasión, sin que nadie lo esperara, la malgueña entraba de sopetón en el debate del domingo.
Sabedora de que el cómico sudamericano no está pasando por su mejor momento desde que arrancó la experiencia en Honduras la presentadora de Telecinco quiso coger el teléfono y, después de hablar con la dirección del programa y contar con su beneplácito, mandarle distintos mensajes de ánimo, eso sí, no sin polémica.
Y es que ésta, durante los pocos minutos que duró la charla, se saltó una de las exigencias clave que existen cada vez que un familiar o ser querido llaman a un superviviente y que reza que está "completamente prohibido comunicar cualquier cosa del exterior".
Después de comentarle que le encontraba muy delgado, María Teresa no dudó en arrancarse a explicarle que muchas cosas han pasado desde que se fuera de casa, aunque prefería que se enterase una vez retornase de su paso por el formato de telerrealidad más exigente que existe actualmente en la televisión en España.
Con cierta cara de preocupación, Edmundo recuperaba la sonrisa cuando su chica agregaba a estas enigmáticas palabras, que suelen acabar con los supervivientes comiéndose la cabeza durante muchos días, otras amorosas, despejando toda duda sobre sus sentimientos.
La conductora de Mediaset España realizaba una confesión de amor pública en la que indicaba que "nada ha mermado lo que siento por ti", para acabar diciéndole que le amaba.
Una vez finalizada la llamada, que no duró más allá de unos pocos minutos, tanto uno como otro, ya después de haber despedido la comunicación, se mostraron visiblemente emocionados y con un buen puñado de preguntas que deberán esperar a solventarse al retorno del cómico a la capital de España.
María Teresa, cada día mejor
Si para algo sirvió la llamada de ayer de María Teresa Campos a Supervivientes, además de para comunicarse con su novio, fue para que la audiencia y sus seguidores supieran que, poco a poco, la malagueña va mejorando del percance de salud que tuvo hace apenas unas pocas semanas. Su recuperación va por buen camino.