Francisco Marhuenda, el polémico periodista y tertuliano en programas como La Sexta Noche, vuelve al foco de la polémica. Si hace apenas unos días se filtraba la enorme bajada de ventas en los periódicos, ocupando La Razón el primer lugar en cuanto a la crisis del papel, ahora el periodista ha querido mostrar su enfado con lo percibido en las tertulias televisivas.

Tertulianos como Marhuenda, descontentos con el salario

Si antaño se trataba de una profesión que movía miles de euros en programas como "La Noria" o "59 segundos", donde sus tertulianos llegaban a cobrar 5.000 o 6.000 euros, en la actualidad, no parece rentar tanto dicha profesión.

Con todo, Marhuenda se caracteriza por tener unas apariciones polémicas en las tertulias a las que acude y su presencia es notoria.

Sin embargo, el descontento del director de La Razón es, principalmente, por la irrisoria cantidad, según éste, que cobra en las tertulias. Llegando a afirmar incluso: "A veces estás 4 horas y te dan 150 euros". Con todo, son muchos los que se preguntan si al tertuliano le queda tiempo para acudir a tantas tertulias siendo el director de un periódico.

La Sexta Noche, la tertulia más polémica

De hecho, confesaba al periódico El Mundo que sus apariciones en televisión se dan en horas fuera de su trabajo, sacrificando de ese modo su vida personal. Pero, además, afirma que acude por mantenerse y sostener su periódico.

Sus apariciones se incrementan porque, de ese modo, aumenta su "prestigio" según él.

Unas afirmaciones que pueden ser ciertas, dada la repercusión que tienen las televisiones en el país. Es más, La Sexta Noche se trata de una de las tertulias que genera más polémica entre sus propios colaboradores, además de los temas controvertidos que se tratan con asiduidad.

Marhuenda e Ignacio González

El propio Marhuenda ha querido comparar su actividad con la de Ignacio González. Este último gana alrededor de unos 4.000 euros por 2 artículos mensuales, eso sí, el director de La Razón defiende al político por estar preparado académicamente para ello, de este modo, el merecimiento es mayor para el tertuliano.

En definitiva, se trata de un controvertido tema que tiene como núcleo fundamental la economía y el posicionamiento social, pues ya son muchos quienes afirman que hay que tener un "don" para mantenerse en las tertulias televisivas, enganchando al público y de ese modo atrayendo cada vez más audiencia, eso sí, en el caso de Marhuenda no sabemos qué efecto ha surtido.