Después de unos meses saliendo en los medios de comunicación criticándose unos a otros, al final, parece que Chabelita y Alejandro Albalá podrían haber decidido paralizar los trámites de su mediático divorcio. Eso sí, sus progenitoras (tanto en el caso de Isabel Pantoja como en el de Paz Guerra) no estrían para nada de acuerdo con esta decisión, con la enésima reconciliación de la pareja.
La noticia sobre otra nueva reconciliación saltó el pasado sábado ante la sorpresa de los medios de comunicación que han ido informando sobre su demanda de divorcio que ya se ha admitido a trámite.
Por otro lado, Isabel Pantoja Junior ya se había dejado ver con terceras personas, por lo que esta reconciliación no se la esperaba nadie. Sevilla ha sido el lugar de la misma (Chabelita, incluso, subió un vídeo para sus seguidores en Instagram en la ciudad hispalense).
Habría dinero de por medio en esta reconciliación
Algunas personas cercanas a Isabel Pantoja señalan que el divorcio sigue y sólo han vuelto por razones económicas. Una de las personas más afectadas ha sido la madre de Alejandro Albalá que le ha defendido a capa y espada sin compensaciones económicas de por medio que ha visto como su hijo ha subido una fotografía junto a Chabelita en Instagram. Otra vez se ha vuelto a enterar de la reconciliación a través de la prensa y no por una llamada de teléfono de su hijo.
Por otro lado se ha enterado de la noticia de que su hijo y su nuera estarían pensando seriamente en parar todos los trámites de divorcio lo que sería una tragedia para ella. La representante de Chabelita no confirma ni desmiente lo que está sucediendo, solamente dice que la pareja ya hablará cuando lo consideren conveniente y de la manera que más le interese.
O sea, estarían preparando ya una exclusiva en la revista del corazón en la que trabaja la joven (esperemos que alguien se la compre y que no les pase lo mismo que cuando se casaron en México y ningún medio de comunicación se mostró interesado en la exclusiva).
Los familiares de la pareja no quieren abrir la boca y no dan su punto de vista sobre esta reconciliación, aunque si se sabe que les ha caído como una jarra de agua fría.
Isabel Pantoja tampoco se lo ha tomado muy bien. Lo primero sigue viendo a su hija como a una niña y no asume la vida que está llevando su hija. Por otro lado le ha aconsejado que siga con los trámites de divorcio ya que ha tardado varios meses en que la justicia aceptase la demanda de divorcio.
Isabel Pantoja, aislada
Isabel Pantoja está encerrada en Cantora intentando desconectar de todas las informaciones y preparando su siguiente concierto que será en el estadio La Cartuja de Sevilla el próximo 24 de junio. Sin duda estamos hablando de una pareja que no tiene ni oficio ni beneficio y habrá que esperar a la siguiente entrega de este culebrón.