Suele pasar en todos los reality show de Telecinco. Una vez se activa el protocolo de abandono de algún concursante, en paralelo, y a la misma velocidad, el equipo del programa se pone en marcha activando el de sustitución para no descompensar los tiempos del formato de tele realidad y dejar el espacio con los mismos efectivos con los que se debe administrar cada programa para que todo vaya según lo programado.

Eso es lo que está sucediendo en Supervivientes 2017 después de que el pasado jueves Alba Carrillo y su madre decidieran abandonar el reality show de supervivencia tras su enésimo encontronazo desde que aterrizaran en Honduras y tras asegurar que se sienten desprotegidas por el programa ante la cacería a la que están siendo sometidas.

Tras el calentón del jueves, la dirección del programa y la cadena no podían convencer a que Lucía Pariente no tomase el avión de vuelta a España, donde deberá pagar una suculenta indemnización como está estipulado en el contrato que firmó antes de enrolarse en la aventura, si bien si lograban que la ex supermodelo se tomase un tiempo para decidirlo.

Un tiempo que arrancaba el mismo jueves por la noche y que se extendía hasta este domingo, teniendo que decidir en la gala, una vez se conecte en directo con el hotel, si toma el primer avión del lunes en dirección al Adolfo Suárez - Madrid Barajas o si finalmente decide seguir adelante en 'Tierra de nadie' y esperar a que sea la audiencia la que la envíe de vuelta a España, eso sí, sin penalización de por medio como parece es el deseo ahora mismo de la ex de Feliciano López.

Entre tanto, como les comentábamos, el programa trabajaba en busca de una sustituta para Alba Carrillo, por lo que pueda pasar, siendo su nombre revelado por el presentador de este espacio y también de Sálvame diario y Sábado Deluxe, Jorge Javier Vázquez. Durante la última emisión de la semana del espacio diario, en el que se encontraba trabajando como colaboradora Chelo García-Cortés, el catalán no dudó en plantearle firmemente la idea de ir a Honduras.

Ni corta ni perezosa, y como esta ha manifestado en varias ocasiones, no dudaba en responder de manera afirmativa la propuesta indicando que si hacía falta se iba a Playa Uva en ese mismo instante, dejando claro cuáles son las ganas que esta tiene de formar parte de una de esas aventuras que quienes la viven aseguran te cambian para siempre. Su marcha o no al Caribe depende, sobre todo, de Alba.