Las aguas no parecen haber vuelto a su cauce en el post-GH17. Todo lo contrario, están más embravecidas que nunca. Las encargadas de provocar este 'tsunami' en las redes sociales han sido, de nuevo, Adara Molinero y Meritxell, ex concursantes de Gran Hermano 17. Las que un día fueran inseparables dentro del concurso, ahora no se pueden ni ver. Y así lo han demostrado en más de una ocasión, pero nunca como ayer. Adara, totalmente fuera de sí, arremetió duramente contra Meritxell, que previamente había hablado sobre Adara y su relación con Pol en un programa de radio de Radioset.
Como no podía ser de otra manera, la respuesta de Adara no se hizo esperar... y comenzó, así, otra nueva guerra en público de ambas ex concursantes. ¡Te lo contamos todo!.
Durante su participación en un programa de Radioset, Meri contestaba a las preguntas de los locutores sobre la polémica que, en su día, hubo con la famosa llamada telefónica de Meri y su hermana a Pol durante uno de sus Periscopes en directo. Supuestamente, a Adara no le habría sentado nada bien que Meri llamara a su chico para "ganar protagonismo", por lo que ya arremetió duramente contra la que, por aquel entonces, seguía siendo su amiga. Ante las declaraciones de Meri en la radio, que no dijo nada nuevo, por cierto, Adara montó en cólera y mostró su peor versión de sí misma en las rede sociales, cargando duramente contra Meritxell e, incluso, llegando a insultarla gravemente con fuertes descalificativos como 'cerda', 'ruín', 'basura', 'mentirosa' o 'niñata sin cerebro', entre otras muchas lindeces.
Del mismo modo, llegó a echarle en cara su 'obsesión' por Alain dentro de la casa y el haber tenido que coger un tren sólo para ir de Madrid a Barcelona para grabar el vídeo de apoyo para la final del concurso; "Un tren me cogí para la mierda de vídeo de tu final". Al respecto de la camiseta que Laura, amiga de Meri y ex concursante, había prometido para sortear entre los fans con las firmas de ambas y de Adara, la madrileña aseguró que no iba a firmar nada "yo firmo lo que me da la gana, pero no valen una mierda sin mi firma", respondía Adara de mala gana.
Quizás, Adara no recuerde que ha salido del mismo sitio que Meritxell, Laura y el resto de concursantes. Es decir, su firma vale exactamente lo mismo que la de cualquier compañero. Se le olvida también, por cierto, que la camiseta no es un regalo para Meritxell, ni para Laura, sino para los fans que en la quedada de Meritxell gritaban "Adara, ganadora" o le pedían fotos.
Sí, a esos que ahora está dejando colgados por una pataleta con su ex amiga. Querida Adara, cuando quieras firmar una camiseta, quizás sea demasiado tarde y ya nadie la quiera. Aprovecha, que la fama es tan efímera como las amistades que hiciste en el concurso.