Aunque hay quienes la califican como un terremoto sin pies ni cabeza, Aída Nízar ha ocupado su tiempo fuera de la televisión y de la mejor manera posible. En la entrevista que dio a Sálvame Deluxe, el personaje más odiado de la televisión ha afirmado que daba charlas de motivación por las que ha llegado a cobrar la cifra de doce mil euros. Una cifra muy suculenta que ha sido fruto del carácter tan entusiasmado y vivo de Aída, que aunque dentro de Gran Hermano y en general, en la televisión, haya hecho un papel de elegida de Dios, lo cierto es que fuera de la televisión le está saliendo rentable.
Sin embargo, Aída Nízar siempre ha querido volver a la televisión, como ella misma afirma, la televisión le encanta y le da la vida. Lo tiene claro, quiere volver para quedarse y parece que en Telecinco tiene un hueco. Eso sí, no sabemos a qué precio. Además de contar a lo que se ha dedicado estos cuatro años alejada de la televisión, Aída ha afirmado que no tiene tiempo para amores, que prefiere trabajar a formar una familia. Algo bastante normal teniendo en cuenta las cifras que pagan por el trabajo que hace.
Lo que no tenemos muy claro es por qué tanto interés en volver a Telecinco. Quizás sea porque en esa cadena su imagen se revaloriza y puede llegar a más personas, de hecho, su interés es llegar al mayor número de personas posible para insertar en sus vidas algo de seguridad en ellos mismos y capacidad para sentirse bien, siguiendo el lema de "amo mi vida" o "adoro mi vida y "adoro a mi familia".
Siendo realistas, estos lemas han sido los que han situado a Aída Nízar en una posición superior que al resto de sus compañeros de la casa de Guadalix. De hecho, es una de las aspirantes con más papeletas para entrar nuevamente en la casa de Guadalix, ganando así la repesca.
También ha hablado de Toño Sanchís, con quien tiene una relación bastante buena, calificándolo como un señor que en todo momento dice la verdad. Esperemos que Toño opine lo mismo de ella y no la deje en un mal lugar.