Uno de los tronistas más queridos de la historia de Mujeres y Hombres y Viceversa, por no decir directamente que el más de todos los que han pasado durante los más de ocho años de emisión ininterrumpida del programa de Telecinco, es claramente Manu Lombardo.

Un chico del que se ha escrito muy mucho desde que hiciera aparición en el dating show que presenta Emma García y que, con su sencillez, llevando un trono con mucha dulzura y delicadeza, y con una final propia de un cuento de hadas, se ganó el corazón de media España. Un privilegio del que sigue gozando, tal y como él recuerda cada vez que sale a la calle y se cruza con alguna fan del programa.

A sus 27 años, aunque algunos pensaran que tenía más, este catalán, natural de la localidad Barcelonesa de Mataró, fue siempre un chico tranquilo desde niño, del que recuerdan era muy bueno. Familiar como el que más, siempre ha demostrado que el núcleo familiar es lo más importante que uno tiene. Es por eso que, cuando se anunció su Final tras año y medio en MYHYV, este lo tuvo muy claro, se haría la maleta y se iría a ver a la familia de todas y cada una de sus cuatro finalistas. Así lo hizo.

Durante todo el tiempo que estuvo sentado en el sillón rojo del programa que conduce Emma García, Manu se mostró tal y como es. Más que respetuoso con sus chicas, no tuvo ningún conflicto con otros tronistas, llegando a la amistad que todavía le une con Cristian, y siendo todo un tipo sencillo y muy detallista que encandiló a sus pretendientas.

De ese chico todavía queda todo, ha asegurado Susana, la elegida del día de su Final y su todavía pareja, indicando que los detalles y la forma de ser tranquila y dulce de Manu sigue intacta con el paso del tiempo, y cuando ambos ya han cumplido su primer año juntos como pareja.Amante de la música y del baile, sólo los que lo conocen bien saben de lo gracioso que Manu puede llegar a ser cuando se suelta. Quizás pronto él y Susana nos anuncien algo grande sobre su futuro. Los dos, encantadores, se merecen lo mejor.