Y es que la Sotelo Ruz no está dispuesta a amedrentarse ante nada ni ante nadie, ni siquiera con respecto a la muerte de su hija en 'Acacias 38', la que ella misma provocó y que no hizo nada por evitar. Recordemos que la pequeña Carlota murió como consecuencia de un veneno que le suministró su madre, cuya única intención era la de ponerla enferma para que Germán no se fuera con Manuela, sino que se quedara en casa con ellas. El problema llegó cuando la niña se bebió el frasco entero de veneno, creyendo que era jarabe, y enfermó hasta la muerte, sin que su padre pudiera hacer nada por diagnosticar la verdadera razón de su empeoramiento.
Cayetana no dijo nada, al contrario, cayó la verdadera razón de que la niña estuviera tan mala, por miedo a que Germán la rechazase para siempre. Ahora, siguiendo la estela de su vida, sigue haciéndose pasar por una desconsolada madre y una devota viuda cuyos intentos solo tratan de ensalzar la figura de su marido y de su hija.
Nada que ver con Teresa, que realmente está sufriendo el drástico giro que ha experimentado la trama de 'Acacias 38', y es que la maestra ha tenido que presenciar el 'sí quiero' de Mauro y Humildad sin poder impedirlo. Eso sí, no es la única que está sufriendo lo indecible la agonía de ver cómo el amor se le escapa entre los dedos, pues también Mauro se muestra incapaz de cumplir con sus deberes de esposo.
La propia Humildad, dándose cuenta de que no le resulta atractiva a su marido, le propone al inspector que yazca con otras mujeres, pudiendo así acompañarla a ella sin tener que hacer algo que no quiera. Pero Mauro rechaza de plano esa posibilidad, sabedor de que lo que a él le ocurre es que está completamente enamorado de Teresa.
Entre tanto, continúan las idas y venidas de los demás vecinos de 'Acacias 38', sobre todo en casa de los Palacios, donde se sigue mascando la tragedia. Pronto descubrirá la familia quién es el responsable de todo lo que le está sucediendo a Ramón, algo muy desagradable al comprobar que no pueden hacer nada por evitarlo. Una situación ésta en la que no se encuentran los Hidalgo, que siguen tratando de continuar con sus vidas tras la muerte de Maximiliano. ¿Lograrán todos ser felices?